Política de Educación sexual obligatoria en todas las instituciones educativas

Política de Educación sexual obligatoria en todas las instituciones educativas

FASE I. IDENTIFICACIÓN DEL PROBLEMA

Ante la creciente cifra de embarazos no planeados en adolescentes y jóvenes, el Estado Nacional es su carácter de generador de Políticas Públicas debe implementar las medidas necesarias para que los niños y jóvenes tengan en sus escuelas primarias y secundarias la materia de educación sexual, para que tengan garantizado el acceso a una educación sexual de calidad que les enseñe e instruya para sus futuras relaciones.

FASE II. FORMULACIÓN DE LA POLÍTICA

Según estudios en la Argentina, cerca de 3.000 niñas menores de 15 años fueron madres en 2015. Además 1 de cada 6 mujeres tiene su primer hijo/a antes de los 19 años. El 69% de esos embarazos no fueron planificados y el 65,5% no utilizaron un método anticonceptivo al momento de quedar embarazadas.

Se recomienda implementar desde los principios de la escolaridad (sala de 3) hasta la secundaria, para que la salud sexual sea un tema más de la curricula.

FASE III. IMPLEMENTACIÓN

1. Se realizará el contenido curricular desde sala de 3 años hasta 5to año de la secundaria. Los temas van a estar variados depende la edad, como ocurre con las demás materias.
2. Se realizarán capacitaciones para los y las docentes y se los formará en los temas.
3. Las instituciones educativas acompañaran estos conceptos, en sus actos, exposiciones o actividades cualquiera que se hagan. Fomentando la equidad de género, los roles desde la niñez, los estereotipos, fortaleciendo lo trabajado en las aulas.
4. Se implementará, conjuntamente con los padres y madres, actividades para que puedan llevar los conceptos a su casas y replantearse también sobre el tema.

Para implementar estas medidas se cuenta con el apoyo económico del Ministerio de Educación de la Nación.

FASE IV. CONSECUENCIAS DE LA POLÍTICA

Como consecuencia de la implementación de estas medidas se espera que los niños y niñas crezcan con buena comunicación sobre la sexualidad, que puedan expresarse, valorar su cuerpo y crecer en ambientes afectivos. Desde pequeños deben aprender sobre las relaciones y saber cuando están preparados físicamente, emocional y económicamente para asumir responsabilidades y consecuencias.

De esta manera, los jóvenes van a aprender a respetarse y que haya más equidad de género, menos abusos sexuales, menos violencia de género y menos enfermedades de transmisión sexual como el VIH y sida.

La información contribuye a lograr actitudes positivas hacia la sexualidad y debe ser un derecho que el estado tiene que garantizar.

FASE V. REFORMULACIÓN

Se realizarán los ajustes necesarios según la coyuntura del momento y la época y de los avances del tema. No es lo mismo hablar de educación sexual en un país donde el aborto esté legalizado, que en uno que no.

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