Raices Mitos Y Tradiciones En El Preescolar

En la actualidad, el jardín de niños sigue alojando ciertos mitos y costumbres, que a través de los años han persistido. Son usos, costumbres y tradiciones que pasan de generación a generación formando parte de la tradición. El docente se preocupa mucho por esas prácticas, incluso se han ido transformando en hábitos de rutina, que forman parte del plan del día, aun cuando la educadora ni siquiera toma en cuenta si realmente es relevante para el niño. Pero como este ha persistido por años a lo largo de la educación inicial, no se siente con la confianza total de modificarlo.

Hay mitos que aun a pesar de los años han persistido en el preescolar. Los mitos son relatos supratemporales y permanentes, y por lo tanto, valen para todos los tiempos. Son supuestos íntimamente vinculados con la cultura, motivo por el cual son históricos, cambiantes. Los mitos son creencias colectivas “de buena fe” que transcurren entre realidad y la ficción.

Algunos de los mitos más sobresalientes del Nivel Inicial son:

a) El mito de la niñez feliz.

La carrera de maestro de preescolar muchas de las veces es elegida, por desconocer la verdadera realidad. El profesor cree que llegar con estos niños será de lo más sencillo y lindo ya que creen en el mito de que todo niño, por el simple hecho de ser niño, es feliz y vive una infancia feliz. A esta creencia social se le adscriben interpretaciones deformantes de determinados enfoques que solo toman en cuenta una dimensión parcializando el concepto de niñez.

Considero que este mito no puede ser del todo real, ya que en la actualidad los niños están expuestos a una serie de problemáticas que en ocasiones ocasiona daños en su persona, así como cuando se ven involucrados en problemas familiares, el niño tiende a presentar problemas en la escuela, lo que le ocasiona un poco de mayor trabajo a la educadora; aunque esta no sea la encargada de resolverlo, es una manera sencilla de aclarar que este mito, no es completamente verídico. El niño que muestra un mayor problema en la clase, no es un niño del todo feliz, ya que su comportamiento está pidiendo algo que necesita, aun cuando es de manera indirecta.

b) El mito del método perfecto.

En este sentido como ya hemos estudiado, el Nivel Inicial está marcado y guiado por lo que es el programa de educación preescolar, en el que se le da a la educadora la guía sobre qué es lo que debe rescatar y fomentar en el niño, lo que va a lograr al momento que el niño pasa por el Jardín, pero sin duda alguna me atrevo a afirmar que ningún método de enseñanza es el perfecto para todos los niños, ya que cada uno de ellos tienen necesidades distintas, tanto de aprendizaje, como de conocimientos, partiendo de lo que cada niño trae de su hogar. Podemos rescatar de las practicas anteriores, que los niños incluso pueden modificar su comportamiento y aceptación de los conocimientos de un día a otro, se ve inmiscuido también el estado de ánimo por el que el niño pasa en cada momento, y es influenciado por el mismo contexto donde se desenvuelve.

Un método no podemos llamarlo perfecto cuando no puede ser aplicado de la misma forma para todos, se puede tener el mismo objetivo y llegar a él, pero creo que nunca será de la misma manera con cada uno de los alumnos.

c) El método de responder

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