Recortes de agua en Mexico

Los recortes o cortes de agua son definidos como “aquellas interrupciones del servicio necesarias para realizar una tarea de mantenimiento en la red de distribución. Estas interrupciones del servicio pueden ser programadas o bien, sobrevenidas por causa de una avería y esto determina la anticipación con la que se pueden comunicar a los usuarios” (Ematsa, 2018)

Al ser el agua uno de los recursos más importante para el desarrollo de una civilización “La centralidad del agua como elemento clave en el desarrollo de la humanidad se hace evidente en el establecimiento de conglomerados humanos al borde de cursos de agua y el desarrollo de la ingeniería de acueductos y canales como manifestación de dominancia y riqueza” (Laufer, 2012), por lo tanto la falta de agua podría traer efectos terribles para una sociedad, según Israel Velasco (2005) la falta de este recurso puede modificar a una gran escala el ambiente de una región y además puede ayudar en el deterioro de la calidad y las condiciones de los habitantes y su ecosistema. Es por esto que el llevar agua a las ciudades es indispensable para su crecimiento, para lograr esto las ciudades crean sistemas de agua para gestionar la distribución de este mismo recurso, las cuales son normalmente operadas por un organismo del gobierno “éstas llevan a cabo la prestación de servicios públicos de Agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de sus aguas residuales” (Perales, 2007) Los servicios son divididos y distribuidos para acatar a las necesidades de la población que varían desde la índole económica, educacional, cultural o de salud que es la que se encarga en parte de la buena distribución del recurso del agua. Hoy en día la distribución de los recursos se ha vuelto un problema bastante importante en la economía de empresas privadas y de gobiernos alrededor del mundo, puesto a que la falta de agua en algunas partes del país causan irregularidades en el sistema de distribución de agua.

Hay ocasiones en las que las sequías y la escasez de agua disminuyen los niveles de agua que se encuentran en las presas o lagos de los que se extrae este recurso, por lo tanto, afecta la red de distribución de agua causando que el gobierno se vea en necesidad de detener esta distribución, creando lo que se conoce como recortes de agua.

2.2. Antecedentes Históricos de los recortes de agua en México

En México, la mayor parte del territorio nacional es considerado árido o semiárido, esto hace que México sea más vulnerable a estas sequías porque son sitios con baja precipitación pluvial a lo largo del año. A pesar de esto, gracias a la construcción de obras hídricas “han permitido modificar, almacenar y ejercer control sobre los distintos cuerpos de agua, con lo cual se ha podido hacer frente” (Esparza, 2014), pero la actividad humana también puede afectar este almacenamiento de agua, ya que la población está acostumbrada a gastar más agua de la que se debería, haciendo que las reservas de agua de una ciudad bajen gravemente.

A pesar de que se ha intentado concientizar este problema en los últimos años, las personas siguen sin tomar en consideración la cantidad de agua que pueden llegar a gastar creando la suspensión del servicio de distribución de este mismo recurso, afectando las vidas de los ciudadanos. Un ejemplo de cómo estos recortes pueden afectar a una ciudad es el que se presentó en la capital del país ocurrido a finales del mes de octubre y principios del mes de noviembre. En este caso se tenía previsto que el corte tuviera una duración de 4 días con una recuperación total del agua en el sexto día, sin embargo, debido a la mala planeación estructural, estos errores ocasionaron el cese de actividades escolares y administrativas en el valle de México y por consiguiente afectando el desarrollo social de una de las ciudades más importantes de América latina.

Este problema no lleva presente solo en la Ciudad de México, sino que alrededor de todo el territorio nacional se puede notar casos de suspensión del servicio de agua. En el valle de Texcoco, la administración del agua y de los mantos acuíferos que lo abastecen ha sido el principal problema en este puesto a que las organizaciones gubernamentales que lo administran han tenido un bajo desempeño “Los años de la pandemia neoliberal mostraron la incapacidad de las reformas economicistas para gobernar y encaminar a la sociedad a mejores estándares de bienestar” (Miranda 2011).

Según Gómez-Valdez (2015) el valle de Texcoco cuenta con un manto acuífero que en los últimos años ha sido considerado el más sobreexplotado de todo el país, eso significa que la extracción de agua subterránea supera el volumen de recarga media anual, a pesar de contar con una gran cantidad de pozos para conseguir agua solo una pequeña cantidad de estos son usados para los servicios dirigidos a la población. Esto causa que la poca cantidad de agua no pueda ser distribuida entre todos los habitantes llevando al gobierno a tener una regulación muy escasa, creando que los sistemas de red tengan “tandas” o horarios en los cuales el servicio se detiene, estos horarios establecidos por el gobierno son considerados por la población como ineficientes puesto a que los horarios son insuficientes para que los ciudadanos cumplan con sus necesidades.

Además del valle de Texcoco, este problema existe en ciudades más industrializadas, Nuevo León cuenta con una organización de la distribución que es considerada como una de las mejores de todo el país, sin embargo esta tiene errores que pueden llegar a ser fatales “una gestión centrada en satisfacer la demanda, sin considerar los efectos ambientales y sociales de estas trasferencias, y sin tomar en cuenta el riesgo de provocar un agotamiento del recurso en el largo plazo” (Monforte, 2012).

Esta organización es llevada a cabo por el Servicio de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM), la SADM tiene como objetivo principal tener un manejo del servicio del agua eficiente para satisfacer la demanda de todos los ciudadanos de Nuevo León, pero esto es cada vez más difícil de manejar puesto a que el estado de Nuevo León cuenta con una población que día a día crece aún más “Un constante crecimiento de la demanda de agua debido al aumento de la población y al incremento del sector industrial y de servicios ha propiciado que la gestión que lleva a cabo SADM se centre en realizar esfuerzos para satisfacer la demanda.” (Monforte, 2012). Esto ocasiona que cada vez más personas demandan este producto y por lo tanto mayor cantidad de agua es usada, y gracias a el gasto que la población, da sin darle importancia este problema hasta que se ven afectados, afecta las reservas y el sistema de distribución causando los debidos recortes en la ciudad.

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