Recuperar el sentido de la escuela

Recuperar el sentido de la escuela

Oscar Orlando Gaitán Ortiz – 148103611

Vamos a empezar este escrito teniendo claro cuál es la visión epistemológica de la educación según el autor Ramón Eduardo Azócar Añez.

La educación es una forma de modificar el hombre, para adaptarlo y posibilitarlo un desenvolvimiento de las posibilidades del ser. Esta modificación no tendría sentido si no implicara una mejora. Por ello, el término ha de entenderse como el perfeccionamiento intencional de las funciones superiores del Hombre, de lo que éste tiene de específicamente humano (Ramón Eduardo Azócar Añez)

Tomando como referencia el párrafo anterior podemos deducir que la escuela lo que busca es moldear a sus estudiantes para de esta forma sacar solamente trabajadores, no fue coincidencia que los grandes empresarios de fábricas e industrias es su época fueron los que aportaron económicamente a las escuelas para que de esta forma se pudieran sostener y a cambio ello lo que hacían eran entrenar trabajadores para la sociedad en pocas palabras crear “robots” que funcionen de forma sistemática sin oportunidad a pensar diferente.

Continuando con la idea del párrafo anterior es bien sabido que durante muchos años varios docente, alumnos y padres han reprochado la forma en la cual las escuelas están construidas las cuales tienen forma de cárceles y empresas e incluso su forma de operar en muy similar a la de una empresa por rangos o cargos encontrando a los estudiantes de últimos en esa escala jerárquica.

Algo que debemos tener muy claro como docentes es que nosotros solo somos unos guías en el crecimiento del niño nosotros solo estamos para darles las herramientas necesarias para que ellos puedan explorar y descubrir, un punto clave en el cual fallan las mayoría de docentes es en corregir al alumno y surge entonces la duda “corregir al niño es malo” y la respuesta es sí aunque suene un poco absurdo es así  porque lo que estamos haciendo es cortarle la creatividad al niño y le negamos esa oportunidad de autocorregirse como una ves lo dijo Thomas Edison “No fracase, solo descubrí 999 maneras de cómo no hacer una bombilla”. Eso es un claro ejemplo de que el fracaso en cierta medida es necesario para poder llegar al éxito. Y esto ocurre a diario en la escuela donde siempre se pretende corregir al niño y no se deja que el niño experimente.

Una forma de contrarrestar lo que se expone en el párrafo anterior es tener material auto correctivo el cual le permita al niño experimentar y explorar pero al mismo tiempo lo llevo a una solución por sí mismo pero el docente también tiene que entender que el aprendizaje no es un proceso de memorización sino más bien es un proceso de ensayo-error donde el alumno pueda explorar por sí mismo nuevas formas de aprender donde se sienta libre de aprender por sí mismo y es en ese punto donde el manejo de las instituciones fallan porque hoy en día el alumno ya no quiere saber nada del colegio después de salir de él y cuando llega otra vez el lunes dice “que pereza ir al colegio” y lo que se busca es todo lo contrario que el alumno genere empatía con el colegio, con las materias y con los temas; es muy raro el niño que después de terminar su jornada escolar tome un libro para leerlo o si quiera repasar la temática aprendida.

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