Situación económica de Juchitán después del terremoto del 7 de septiembre
Enviado por Javier Sanchez • 12 de Noviembre de 2021 • Ensayo • 3.287 Palabras (14 Páginas) • 68 Visitas
INSTITUTO DE ESTUDIOS SUPERIORES[pic 1]
DEL ISTMO DE TEHUANTEPEC
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Licenciatura en derecho[pic 3][pic 4]
Profesora: Lic. Mónica Aguilar Robles
Materia: Economía Política
Trabajo: Situación económica de Juchitán después del
terremoto del 7 de septiembre
Alumno: Enrique Hernández Sánchez
Grupo: 5° “A”
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Juchitán de Zaragoza Oaxaca a 19 de enero de 2018
Introducción.
El pasado mes de septiembre del año 2017 un terremoto de 8.2 grados con epicentro en Pijijiapan, Chiapas, azotó la ciudad de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, personalmente tuve la oportunidad de salir a recorrer las calles minutos después de que aquel desafortunado evento sucediera, mis vecinos perdieron su casa, a decir verdad su casa se les vino encima. Tardamos 20 minutos en sacarlos de entre los escombros, nadie resulto herido de gravedad salvo un niño pequeño, afortunadamente sobrevivió.
Por su parte, la ciudad, mi ciudad, ciudad donde e crecido la mayor parte de mi vida, quedo devastada. En las calles solo podía respirarse el polvo, la luz se fue nada más comenzar el terremoto por lo que en principio tener visibilidad a esas horas (23:57) debería haber sido cuanto menos difícil, afortunadamente había luna llena y el cielo estaba despejado.
Caminar durante la madrugada por Juchitán después del terremoto fue como dar un paseo por una zona de guerra, como he dicho, solo podía respirarse el polvo, habían ruidos de gente corriendo por todas partes, algunas casas continuaban cayéndose, en las calles y a lo lejos podían distinguirse los sonidos de ambulancias, patrullas y bomberos, no dudo que esas personas estuviesen dando su mejor esfuerzo por ayudar, el problema era que las personas que necesitaban ayuda eran demasiadas.
Cables, escombros, polvo y agua proveniente de cisternas que se rompieron por las continuas sacudidas de la tierra en aquella noche, eran lo que más podía verse en las calles, además de las personas que corrían de un lado a otro, algunas desesperadas otros solo intentando ayudar.
Juchitán nunca se ha caracterizado por ser una ciudad segura, pues en más de una ocasión si llegas a visitar estas tierras te tocara escuchar la sirena de un coche patrulla yendo a algún lugar, que te asalten es algo común, desgraciadamente los asesinatos también lo son. Curiosamente aquella noche todos se unieron, todos estuvieron juntos como hermanos pues por las calles escuchabas frases como “¿Estas bien?” o “¿En qué te ayudo?” después de todo, nos encontrábamos en alerta máxima.
Si bien es cierto, Juchitán durmió en las calles y avenidas durante un par de meses, muchos perdieron su casa, otros sus trabajos o escuela, incluso perdimos el hospital, y como era de esperarse la ayuda estaba en camino.
Fue en los primeros días, los camiones de despensa llegaban, ropa, agua, alimentos tanto para las personas como para las mascotas, si una sociedad conformada por personas que miran solo por su propio interés era capaz de mostrar esos actos de desinteresada amabilidad y empatía, entonces el gobierno también tenía que hacer algo al respecto.
Programa de reconstrucción de viviendas.
La base de un pueblo está en sus habitantes, pero ¿Qué pasa cuando sus habitantes no tienen hogar? Bueno, eso ocurre en esta ciudad, la gran mayoría de su población ha perdido su casa, los más afortunados corrieron a casa de otros familiares, algunos otros salieron del estado, los menos afortunados tuvieron que quedarse y librar con las consecuencias de una placa tectónica que se movió bruscamente.
El gobierno respondió enviando a personas del Fonden para evaluar los daños, pero las personas afectadas son demasiadas y no se dieron abasto pues no solo debían censar Juchitán, sino también todo el istmo, todo Oaxaca, Chiapas y otros estados que también se vieron afectados, por lo tanto fue un trabajo pesado y tardado.
Al no darse abasto para censar las casas protección civil también se introdujo y empezó a ayudar, más tarde pidieron ayuda a los particulares y ellos también entraron. Debo decir que me toco ser parte de las personas que censaban las casas y me dolió ver mi ciudad en tal estado de destrucción, en más de una ocasión vi a ancianos, mujeres y niños llorar sobre los escombros de su antes llamado hogar, suponiendo que fue tu bisabuelo quien comenzó la construcción de tu casa, tu padre fue quien la continuo y tu quien la terminaste, al menos se han llevado 20 años entre todos, entonces; ¿Qué ocurrirá con esas familias sin empleos ni hogar a causa del terremoto?
“En la región del Istmo en el estado de Oaxaca, y en Chiapas, ha concluido el censo de damnificados por el sismo, y a partir de la próxima semana iniciarán las labores de reconstrucción, a través de diversos mecanismos.” – Presidencia de la republica 22/Sep/2017
“Se entregará en cada domicilio afectado una tarjeta, que les permitirá comprar material para construcción, y disponer de una parte en efectivo para pagar la mano de obra … La población afectada tendrá acceso al Programa de Empleo Temporal para autoconstrucción, de tal forma que también podrá tener un apoyo económico adicional al que se recibirá en la tarjeta que les será entregada.” –Presidencia de la republica 22/Sep/2017
Así pues, las dichosas tarjetas fueron entregadas, en principio todo marchaba bien, las personas compraban materiales y comenzaban a reconstruir sus casas.
Pero como era de esperarse, algo andaba mal, los dueños de las tarjetas se dieron cuenta que muchas viviendas que habían perdido más de la mitad de la misma se habían catalogado como “daño parcial” y solo estaban recibiendo quince mil pesos, por su parte, aquellos cuyas casas habían sido completamente devastadas estaban percibiendo ciento veinte mil pesos, cosa que estaría bien de no ser porque eso apenas y alcanza para construir una casa de un solo cuarto.
"vamos a poner a disposición, además del apoyo que será igual al que se otorgue a todas las viviendas afectadas, el acceso a un crédito blando para que puedan, si requieren de más recursos, ampliar la construcción de estas casas". –Enrique Peña Nieto, Presidente de la república.
¿Puedes imaginarte querido amigo lector el estar en esa situación? No solo haz perdido tu casa y el dinero que estas recibiendo apenas y alcanza para construir un cuarto pequeño, en el mejor de los casos aún queda una parte de tu casa en pie, pero solo te están dando quince mil para reconstruir la parte que fue derrumbada, si quieres reconstruirla como estaba deberás endeudarte con el estado mexicano por quizá, el resto de tu vida, solo así podrás volver a tener tu patrimonio, patrimonio que por una casualidad del destino se vino abajo tras un ataque de la madre naturaleza, patrimonio que el estado debería reconstruirte, pero que no lo hará; después de todo no es “un buen negocio”
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