Sobre El Aborto Y La Eutanasia. Dilema Social

Los debates que se dan en la cotidianidad al hablar del aborto y la eutanasia se ocasionan desde el pensamiento de cada uno, y desde los argumentos, opiniones, datos, principios, realidades, y ciertos universales éticos en los que se apoyen o nutran su acto moral. Esto deja además entre ver que la ética por más de presumirse como universal, tiene en ocasiones algunas excepciones teniendo en cuanto los variantes específicos de los casos dados. El final de los dilemas sólo se dará en el caso en que un principio sea adoptado por todos, y rompa las barreras tanto geográficas, culturales e incluso personales. Por el momento el debate desarrollado en el foro se basó en la pregunta ¿Si a mí me hicieran esto me dolería? ¿Me gustaría que me lo hicieran, o no?. El aborto y la Eutanasia son temas que causan gran polémica a nivel mundial, por un lado tenemos la religión que dice que Dios nos dio la vida y es el único que decide quitárnosla, mientras que las leyes hablan del derecho fundamental a la vida, y que todo acto que atente contra ella es considerado un delito.

El aborto.

En sentido lato, aborto es la muerte del producto de la concepción y su expulsión del organismo materno en cualquier fase de su desarrollo pre-natal. Se puede dar de dos formas: Espontáneo (cuando se presenta por sí solo) e inducido (pueden ser practicados de manera rudimentaria y/o clandestina, o de manera clínica.).

Existen dos posturas que jamás se encontrarán: por una parte están los que están a favor de la despenalización del aborto y plantean que es una decisión personal de cada mujer y por otro los que sugieren que no se puede hacer legal una práctica como ésta, ya que atenta directamente contra la vida de los seres humanos.

Estas posturas se toman a partir de la educación que se imparte en primer lugar desde los núcleos familiares. Pero también existe la información que brindan las entidades de salud como Profamilia en donde promulgan los derechos sexuales y reproductivos (incluyendo los tres casos de despenalización del aborto como parte de un derecho), bajo los principios de oportunidad, calidad, confidencialidad y respeto por las decisiones que toman las mujeres. En lo debatido finalmente todos los participantes mostraron una oposición plena al aborto, quizás por la educación familiar impartida como lo explicita la compañera Maria Elsy: “mi formación y educación familiar me hace ver el aborto como algo mal hecho, equivocado, algunas personas lo llaman asesinato, para mi es algo mal hecho y equivocado.”

Aborto: la ley humana (judicial) vs ley divina (creencias religiosas).

Se ha convertido en un dilema ético pues algunos se apoyan en los derechos internacionales de la mujer aceptados como éticos para diversas poblaciones, Esto va además de la mano de la toma de decisiones de cada uno, el poder sobre el propio cuerpo y el derecho de la vida en ocasiones de la mujer. Claro que también existe un factor religioso, principalmente entre cristianos y católicos. Estos han de tener en cuenta la fe en la misericordia de Dios, o como dice el dicho “Todo niño trae consigo un pan bajo el brazo”. Así, teniendo en cuenta que la mayoría de abortos se dan por embarazos no deseados o como dije anteriormente por malformaciones y/o riesgos en la vida tanto de la madre como del pequeño aquellos que apoyan su argumento ético en la religión se regirán bajo el principio que Dios crea a cada uno y es perfecto para el así no lo sea para el hombre.

Todo surge a partir de la diferenciación entre individuo, persona, ciudadano y humano. El primero hace referencia a las características de un ejemplar de una especie determinada, que se caracterizará por ciertas cosas que lo hacen único, en la especie humana. El ciudadano hace referencia a aquel ser humano mayor de 18 años, lo que implica que es responsable de sí mismo, y ejerce todos los derechos y deberes instaurados frente a un gobierno. Por último la persona es aquel con plenitud de derechos, con la condición de pertenecer a la especie humana y estar vivo. Este último se designa a aquellos bebés nacidos vivos a los cuales ya se les ha cortado el cordón umbilical, dejando de ser uno con la madre. Por esto el aborto se aplica para aquellos que no son consideradas personas, y así se diferencia del homicidio. Entonces el argumento ético de los decretos promulgados en diferentes países se basa bajo este principio jurídico.

Así volviendo a argumentos religiosos este ser mujer trae por sí misma la reproducción, sin esto querer decir que solo seamos máquinas de traer hijos; pero sí es claro que a pesar de las diversas opiniones un embarazo no ocurre siempre que existan actos sexuales, sino que también se vuelve un acontecimiento. Tengamos en cuenta las cifras, por cada ml de semen puede haber unos 50 a 150 millones de espermatozoides, en una carrera para fecundar un solo óvulo; el cual no es siempre fecundado. De allí que el embarazo sea una celebración.

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