Solo en el mundo
Enviado por allltns • 16 de Noviembre de 2011 • Ensayo • 377 Palabras (2 Páginas) • 503 Visitas
Español
Antes de leer: realiza predicciones sobre la lectura en función del título.
Instrucciones: Escucha con atención la lectura que realizara tu maestra.
Al momento de leer: Utilizar alguna estrategia de lectura.
Solo en el mundo
Luisito se durmió tarde esa noche. Estuvo bastante enojado con sus papás. ¡Siempre le quieren ordenar lo que tiene que hacer, aunque muchas veces no valla con sus deseos!
En esta ocasión, al despertar, Luisito siente algo diferente. Toda la casa está muy tranquila. Ni siquiera escucha a su hermana que normalmente no deja de hacer ruido ni un momento. SE levanta, mira a su alrededor, se viste y va a la cocina, al baño, a la sala. No hay nadie. Qué bien, así puedo salir sin permiso… piensa Luisito. Y no me tongo que bañar, ¡que día mas feliz! Sale a la calle, entra al supermercado y todo está vacío.
Lo primero que ve es el estante de chocolates y galletas. Se hecha a correr para lo más que pueda. Se llena los bolsillos del pantalón con los chocolates. Hmm… ¡Qué sabroso! Y no está mami advirtiéndole da las malas consecuencias de comer tantos dulces. Si no hay ningún adulto,¡ puedo ir a los juegos de parque de San Martin sin pagar!, se alegra Luisito. Me llevo del mercado diez globos y los inflo hasta que revienten, ¡que divertido!
En el camino, ve el mostrador de la tienda de juguetes. Entra y busca sus juguetes preferidos: el coche de bomberos con lucecitas y bocinas, la grúa que se mueve cuando uno oprime un botón, el helicóptero. Juega y juega, olvidándose del tiempo. Pero ¿cuál tiempo? Tengo todo el tiempo del mundo, no me controla nadie, se sonríe Luisito.
Al rato se siente cansado y regresa a la casa, pero no ha llegado nadie. Tiene hambre y se le antojan las albóndigas ricas que sabe hacer su mamá. Pero como no ésta en casa no hay comida. Luisito busca busca el pan que sobro de anoche y se lo come para calmar el estómago. Se pone a revisar todos los cajones y roperos, juega con la grabadora, pinta con sus lápices de color en las paredes, hace música con las tapaderas de la ollas… Hace todo aquello que más le gusta y que los adultos siempre le impiden hacer.
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