TRABAJO PRÁCTICO Nº 1 Pedagogia
Enviado por RutRenataSergio • 13 de Septiembre de 2017 • Trabajo • 1.813 Palabras (8 Páginas) • 224 Visitas
Primer periodo - 2017 [pic 1]
Materia: Pedagogía
N° de aula:
Apellido y nombre:
Profesor: Dra. Mónica Fernández
TRABAJO PRÁCTICO Nº 1
Consigna para realizar el TP: Elijan dos textos del listado indicado para realizar el TP1 obligatorio, la idea es identificar y comparar la perspectiva que cada autor presenta para referirse a los siguientes términos:
Discurso pedagógico. Escolarización. Educación. Disciplinamiento. Rol de la infancia. Normatividad/normalidad. Metodología pedagógica. Examen. Rol del/a docente
Desarrollo:
Desde sus bastas trayectorias, Lasalle y Comenio, han contribuido de una forma u otra al desarrollo de la pedagogía que hoy conocemos. Para comprender un poco más la concepción pedagógica de ambos, haré un repaso sobre los diversos aspectos que se observan en las siguientes obras:
- J. B La Salle: “Meditaciones sobre el misterio de la Enseñanza”
- J.A Comenius: “Didáctica Magna”
Juan bautista Lasalle, fue un sacerdote, teólogo y pedagogo francés, que llego a ser canonizado el 24 de mayo de 1900 por León XIII, como así también proclamado “Patrono de todos los maestros y maestras de niños y jóvenes” por el papa Pio XII en 1951.
En su obra, estableció algunos postulados que debían seguir religiosamente los educadores, considerados enviados de Jesucristo para la salvación de los niños.
La Salle, imagina al maestro como un sustituto de los padres en cuanto a la educación, diciendo que “… corresponde poner en lugar de los padres a personas suficientemente ilustradas y celosas que comuniquen a los niños el conocimiento de Dios y sus misterios…”[1] , estableciendo una alianza entre la escuela y los padres. Para Lasalle el educador tiene como objetivo principal ejercer un control permanente porque debe velar por la salvación de las almas de sus discípulos. “… velar de continuo sobre vuestros discípulos (…) procurando que se abstengan de cuanto presente la menor apariencia de pecado…” [2] Determinando así, una importante herramienta para la educación: la vigilancia.
El pensamiento de Lasalle se caracteriza por el detalle y la reglamentación en sus propuestas siempre aludiendo a la obra de Jesucristo y a Dios como ejes de sus reflexiones.
Referido al Disciplinamiento de sus discípulos en el capitulo XII, menciona tres puntos que él considera esenciales para la corrección de las malas acciones: El maestro debe corregir con la mirada puesta en Dios, “…movidos por el espíritu de Dios (…) se los debe reprender y corregir con justicia, haciéndoles caer en la cuenta de su mal proceder, y de que su falta merece castigo, y procurando que acepten de buena gana la corrección…”; El maestro debe corregir con moderación y paciencia “…la moderación es uno de los mejores medios para ganar y conmover el corazón de los que han caído en falta, y para disponerlos a convertirse…”; La corrección es deber del maestro, “…si no vigiláis su conducta (…) habréis de responder ante Dios de las faltas que ellos hayan cometido…”
Otro eje fundamental para ejercer el deber del maestro sobre sus discípulos, es el silencio. Dice que el maestro debe atender a las conductas, a la voz, y el control del cuerpo (es decir, a las posiciones necesarias para desarrollar las actividades áulicas, como por ejemplo la lectura, escritura, oración)
Siempre en pos de ayudar y enseñar a los pobres, Lasalle pregona la gratuidad de la enseñanza en las escuelas[3]. Aludiendo que las personas que no mandan a sus hijos a la escuela por no poseer los medios necesarios, ponen a éstos en manos de las malas compañías, transformándolos en vagos que incurren al pecado fácilmente.
Si bien Lasalle pone el ojo en cómo ser un buen docente para el alumno, se puede observar que tiene una concepción de infancia muy débil, en el sentido que siempre se está refiriendo al niño como alguien a quien moldear, un ser propenso al pecado el cual muchas veces no tiene el apoyo de sus padres los cuales al ser pobres también son carentes en todos los aspectos.
También podemos notar que la educación que Lasalle presenta utopías, planteando a través del riguroso método de observación, corrección, y vigilancia, como así también a las normas y reglas que propone tanto para el docente como para el alumno. Es decir, a un ideal educativo que sería el de un docente supremo y responsable educador que debe lograr transformar a sus discípulos (carentes de educación) en seres disciplinados, con modales y compartimientos propios de hombres al servicio de Dios.
Comparando la visión educadora que propuso Lasalle con la actualidad, podemos ver que tan alejada es su concepción de lo que hoy podemos vivenciar en la sociedad y particularmente en las escuelas. Hoy, nos es imposible pensar que el docente, por ejemplo, sea el “dueño del saber”, dado a que muchas veces nos toca aprender de nuestros propios alumnos (Ej. Referido a las tecnologías). También, vemos muy desdibujada la entidad familiar como apoyo de sus hijos, si bien las escuelas son gratuitas muchos padres ignoran la necesidad de que sus hijos adquieran la educación que se merecen. La disciplina planteada por Lasalle, también es totalmente ajena a lo que hoy experimentamos, ese ideal de alumnos en silencio, disciplinados, atendiendo fielmente a la figura del docente y sus castigos impuestos para su bien, es una realidad intangible para nosotros, sabiendo que hoy todas las propuestas pedagógicas apuntan al respeto por el niño y el joven en su educación, y asumiendo también que nuestra postura en la sociedad está muy deteriorada y no se consigue en muchos casos el apoyo del docente al maestro como lo planteaba ese autor.
...