Tasa De Población Encarcelada

España es uno de los países más seguros de Europa, con una tasa de criminalidad de 45 delitos por cada mil habitantes. Solo Grecia (38) y Portugal (40) registran una menor delincuencia. Sin embargo, la población reclusa española duplica la media europea, y supera con diferencia a la existente en Italia, Francia o Alemania. En nuestro país, a fecha de junio de este año, hay encarceladas casi 73.000 personas, más del 70% por tráfico de drogas y robos relacionados con el consumo de sustancias estupefacientes.

Con esta cifra, la tasa de reclusos en España es de 153 por cada 100.000 habitantes, más del doble que en la Unión Europea (70). Pero, además, las prisiones de aquí son las más pobladas de Europa, tal y como señala un estudio de la Fundación Atenea. Las cárceles españolas tienen capacidad para unos 921 internos, mientras que en el continente los centros disponen de 593 plazas.

La población reclusa ha descendido con respecto al año pasado (-3.700), pero sigue siendo mucho mayor que la de países de Europa Occidental. Por ejemplo, Suecia tiene la mayor tasa de criminalidad de la UE, y es al mismo tiempo uno de los estados con menor población reclusa (76 por 100.000 habitantes). También hay diferencias con respecto a Italia (81 reclusos), Francia (96) o Alemania (91). Y Grecia, el país europeo más seguro, está a la cola en proporción de presos (76).

Los países de Europa del Este, como Polonia, Estonia o Lituania, registran una mayor densidad de población reclusa y superan a España.

Reincidencia

El estudio de la Fundación Atenea llama la atención por la elevada reincidencia de los presos españoles, ya que dos de cada tres vuelve a cometer un delito cuando sale de la cárcel. Además, el 13% de los presos había estaba en un centro de internamiento para menores. La organización destaca un dato preocupante relacionado con el hecho de ingresar en la cárcel tan joven: ocho de cada diez personas que han pisado una celda con 20 años lo volverá a hacer como mínimo cuatro veces más a lo largo de su vida.

Para esta organización que trabaja con la población reclusa, este dato debe hacer reflexionar a los poderes públicos, para comprobar si las políticas penitenciarias logran el objetivo de reinserción social y educación, tal y como se recoge en el artículo 25.2 de la Constitución.

Trabajos a la comunidad

El Gobierno responde que se están promoviendo medidas alternativas a la prisión. En la actualidad 119.000 condenados están realizando en estos momentos trabajos en favor de la comunidad. El Ministerio del Interior apunta que si en 2000 se dictaron 800 sentencias con penas alternativas a la prisión, entre enero y agosto de este año se han acordado 150.000 resoluciones de este tipo.

La Fundación Atenea pone el acento en la falta de programas efectivos

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