Trabajo De Los Menores

EL TRABAJO DE LOS NIÑOS. REALIDAD Y LEGISLACIÓN

"La humanidad debe al niño lo mejor que puede darle...”

El trabajo infantil se refiere al trabajo de niños en cualquier sistema de producción económica de un país, una región y en el mantenimiento económico de un grupo o clan familiar. En México son considerados como infantes todas aquellas personas menores de dieciocho años, y la Ley Federal del Trabajo en su Titulo Quinto Bis, particularmente su artículo 174 establece que: son menores con capacidad para trabajar los menores mayores de catorce años y menores de dieciséis; además de los que están entre esta última edad y los dieciocho años, opinión que se basa en que en esa etapa un ser humano cambia biológica, psicológica y físicamente quedando apto para desempeñar cualquier tipo de labor.

Sin embargo, es común ver como los padres o personas encargadas de un menor los explotan para obtener dinero, por ello “el pan de cada día” es ver niños pidiendo dinero en medio de las avenidas; obligación que los infantes casi siempre cumplen bajo maltrato y la discriminación, aun cuando en la actualidad estamos regidos por una constitución donde se respaldan sus derechos y obligaciones, pero que sin embargo se dejan pasar muchas cosas o bien nosotros formamos parte de la impunidad que surge al no hablar y denunciar lo que sucede realmente sucede, por ello deben de estar más protegidos por la ley y por la gente de su alrededor ya que ellos no pueden defenderse. La explotación infantil es un hecho que involucra a todo el mundo, sin embargo en los países como el nuestro en vías de desarrollo, es común ver este problema.

Nuestra sociedad comúnmente siempre tiene problemas económicos, por lo que es fácil prever tiempos difíciles para las familias, ocasionando con ello, que los menores se vean en la necesidad de salirse de la escuela para encontrar trabajo de lo que sea, exponiéndose a cualquier abuso de parte de los empleadores. En la mayoría de los casos, contraviniendo lo que dicta el artículo 177 de la legislación laboral, existe explotación de menores imponiéndoles horas de trabajos de diez horas en condiciones deplorables, o aun más triste es ver a “niños de la calle” pidiendo dinero o niños enfermos que le rinden cuentas a un señor sin que ese dinero ayude o sea para los menores, sino al contrario, lo que hace que sea más grande el daño, ya que su esfuerzo no es remunerado.

Algunos otros niños y adolescentes trabajan por acompañar a sus amigos, utilizando sus ganancias para cubrir sus propias necesidades, pero por el gusto de manejar dinero se van quedando mayor tiempo en las calles, adaptándose a las vivencias de la calle.

La UNICEF dijo que para el 2009 alrededor de 246 millones de niños y niñas son sujeto de explotación infantil en el planeta y al menos tres cuartas

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