Uno de los acontecimientos más recientes y del cual se ha hablado mucho en los últimos días, es la propuesta de reforma tributaria que se llevó al Pleno del Congreso de la República para ser aprobada.

Análisis de Coyuntura

Reforma tributaria 2016

Uno de los acontecimientos más recientes y del cual se ha hablado mucho en los últimos días, es la propuesta de reforma tributaria que se llevó al Pleno del Congreso de la República para ser aprobada.

Esta propuesta ya se veía venir desde hace algunos meses, a pesar de que durante la campaña electoral Jimmy Morales afirmó que no subiría los impuestos; pero fue hasta principios del mes de agosto que se empezó a escuchar sobre esta propuesta, fue así como el 11 de agosto el presidente Jimmy Morales anunció una reforma tributaria. El motivo de la propuesta es financiar la inversión en salud, educación, justicia e infraestructura

Básicamente, la reforma trata de enmendar los errores que tuvo la que realizó el gobierno de Pérez Molina en 2012 y 2013, la cual tuvo pocos resultados en términos de recaudación, regresando al régimen tributario vigente antes de 2012. 

Alrededor de esta propuesta circularon muchos comentarios y especulaciones, dentro de las cuales estaba que ese paquete incluía un ajuste del IVA al 15 por ciento, algo que posteriormente fue desmentido por el Ministro de Finanzas y en efecto al ser presentada la propuesta al Pleno no incluía el aumento al Impuesto al Valor Agregado.

Antes que la reforma fiscal se diera a conocer ya varios sectores como las cámaras empresariales que se encuentran en el CACIF y Fundesa comenzaron a plantear la necesidad de un “diálogo fiscal” para fortalecer la base financiera del Estado, esta actitud solo mostraba que existe intereses tras escena.

La propuesta que finalmente fue enviada al Congreso a mediados de mes se basaba en cuatro medidas: subir tasas el ISR, grabar productos derivados del petróleo, un impuesto al cemento y aumento de las regalías mineras. Esto provocaría un impacto de recaudación esperado en 2017 era de Q 5.9 millardos, equivalentes al 1.1% del PIB, que es menor al “efecto SAT” actualmente en marcha, que podría llegar en 2019 a 1.4% del PIB, según el cálculo de las propias autoridades. Los cambios que se realizarían en cada impuesto se ven reflejados en el siguiente cuadro:

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Fuente: Ministerio de Finanzas

Sin embargo, elevar los impuestos al cemento y a los derivados del petróleo sin duda repercutirá en un incremento de precios y una espiral inflacionaria, y el gobierno no tiene una propuesta seria para evitar tal cosa. Y como siempre a sucedido a quien más afecta todo esto es al consumidor final, pero deberá pagar más por un producto o servicio, afectando el bolsillo de los guatemaltecos.

Dentro de este acontecimiento, existen personajes importantes el Presidente Jimmy Morales, el Ministro de Finanzas, los sectores económicos del país y el Congreso de la República, cada uno con un interés en particular, pero consideramos que tenían claridad en que esa propuesta no tiene estrategias definidas, lo que dio lugar a ser fácil blanco de la crítica que dice que es un mal ajuste de tasas impositivas, sin claridad de priorizar el gasto, no incluye medidas de transparencia.

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