Venezuela

PROBLEMÁTICA ACTUAL EN VENEZUELA

Tras la muerte del Presidente Hugo Chávez, ha existido últimamente la disputa sobre si Venezuela es o no una democracia. Los periodistas y expertos han estado dando sus propios puntos de vista, haciendo que recibamos información que ellos creen correcta.

Pero ¿cómo separamos la democracia de una dictadura? Para Martin Lipset la democracia está ligada al desarrollo económico de un país.

Antes de la llegada de Hugo Chávez, Venezuela tenía un régimen democrático, sin embargo la situación ha ido cambiando desde su gobierno, cuando comenzó a tomar medidas socialistas, influenciadas por los países socialistas, de izquierda y principalmente por el mandatario de Cuba, Fidel Castro.

Basándonos en la teoría de Martin Lipset, actualmente Venezuela no puede ser una democracia. Tal vez aparente ser una por el hecho de que el pueblo eligió a su representante, pero es una democracia disfrazada; la gran polémica que se está presentando en Venezuela hoy en día se debe al descontento de la población con el gobierno de Nicolás Maduro, sucesor de Hugo Chávez, ya que el país está muy desesperado por sufrir las tasas de inflación, los homicidios, la falta de libertad de expresión y la escasez de productos de primera necesidad. El presidente ha hecho caso omiso a los cambios que el país está pidiendo y ha decidido reprimir a los que piensan de manera diferente, agravando la situación.

Lipset dice que el desarrollo económico es muy importante para un régimen democrático, sin embargo, Venezuela atraviesa una crisis económica marcada por una inflación del 56.3% y una escasez del 28% de productos y alimentos básicos, según cifras de enero.

Giovanni Sartori, piensa que el ideal de la democracia, nos señala el camino para perfeccionar el régimen democrático; es decir, al ir ejerciendo la democracia, es ella misma la que va a ir perfeccionando ese régimen, porque cada vez que el pueblo elige a sus gobernantes se dan los lineamientos, las bases, las reglas, etc. para las elecciones siguientes.

Como en Venezuela no se está ejerciendo verdaderamente la democracia, sino que es sólo una fachada tanto para el mismo pueblo como para los demás países, nunca se podrá llegar a un perfeccionamiento de la misma.

Robert Dahl, piensa que no son suficientes las condiciones económicas y sociales en la que se encuentre una nación, sino que es más importante el desarrollo de ciertos valores y actitudes de los ciudadanos, porque son ellos los que impulsarán el desarrollo del país en todos los aspectos, y en relación con nuestro tema, el gobierno, con sus medidas de represión, violencia y terror que infunde en sus gobernados, no está formando valores cívicos ni de ningún otro tipo y la actitud que están tomando los ciudadanos es de coraje, impotencia y resentimiento; lo que se está demostrando con tantas protestas

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