Violencia de género entre la población adolescente

INSTITUTO SUPERIOR DE INVESTIGACIÓN Y DOCENCIA PARA EL MAGISTERIO [pic 1]

DOCTORADO EN INVESTIGACIÓN EDUCATIVA APLICADA

EPISTEMOLOGÍA

Reporte de Lectura

Elaborado por: Carlos Alberto Velázquez Castro    

Fecha: 01/Octubre/2022

REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA:

Hessen, J. (1999). Teoría del Conocimiento. Porrúa, Col. “Sepan cuantos…”, núm. 351, México.

El tema sobre el que pretendo llevar a cabo mi investigación tiene que ver con la violencia de género entre la población adolescente, ante lo cual, indudablemente encuentro relación directa con la posición epistemológica del dogmatismo, es decir, cuando hablamos de relaciones de género desiguales en las que se hace evidente la dominación por parte de unos sobre otros, nos encontramos que el fundamento de tal dominio consiste en la implantación a lo largo de la historia de ideas que se consideran “ley natural” o principios innegables (dogmáticos), que han sido construidos por el sistema patriarcal en que vivimos; o lo que es lo mismo, al amparo de la normalidad de una cultura levantada sobre las referencias masculinas y, por tanto, comunes a nuestro género.

En este sentido, la perpetuación de esta construcción social es defendida por todos, no sólo por los que se benefician de manera directa en un momento dado, sino también por aquellos que podrían verse beneficiados en el futuro, como es el caso de los adolescentes. Cada uno sabe que el modelo androcéntrico es benéfico para el género masculino en su conjunto y, que los privilegios pueden hacerse presentes en cualquier momento.

Entendiendo como dogma esa especie de verdad incuestionable, resulta evidente que su carácter hegemónico se define desde una posición de poder dentro del grupo o comunidad en el que se crea. Si alguien establece un dogma sin contar con ese poder dentro de la sociedad, el resultado será completamente distinto, y quien lo haga será considerado un extravagante o un inadaptado, tal como sucede con las mujeres que cuestionan el status quo y pugnan por un cambio social.

Por lo tanto, el dogma es un reflejo en sí mismo del poder, y por ello se le protege frente a críticas y posibles ataques. El planteamiento es muy sencillo, si los hombres creamos “dogmas” basados en nuestra superioridad natural y sobre ellos nos hacemos acreedores a beneficios y privilegios que se comienzan a reproducir desde edades tempranas, entonces, las únicas personas que podrían cuestionar esa dinámica relacional desigual serían aquellas que quedan excluidas y sufren las consecuencias negativas de tal injusticia, es decir, las mujeres, sin embargo, su capacidad crítica y veracidad ha sido limitada por la propia cultura que crea los dogmas.

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