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A lo largo de la historia de la humanidad, es posible encontrar concepto de organización dentro del conjunto de actividades desarrolladas por el hombre, de manera colectiva, con el fin de lograr metas comunes y donde cada quien cumple un rol específico.

Actualmente, como resultado de los constantes cambios y avances tecnológicos, es posible encontrar que las organizaciones están conformadas por diferentes conjuntos de personas que articulan sus esfuerzos para realizar tareas complejas, dividiéndolas en partes más sencillas, con el fin de alcanzar logros individuales y colectivos. Además, son entidades legales independientes, que tienen la capacidad de contratar, realizar intercambios comerciales y realizar transacciones.

Según Weihrich y Koontz (2003), “(…)Un papel organizacional que tenga significado para las personas, debe incluir 1) objetivos verificables, los cuales constituyen una parte muy importante de la planeación; 2) una idea clara de los principales deberes o actividades y 3) un área sobreentendida de discrecionalidad o autoridad para que la persona que cumpla una función sepa lo que puede hacer para lograr las metas.

En este sentido se piensa en la organización como 1) la identificación y clasificación de las actividades requeridas, 2) el agrupamiento de las actividades necesarias para lograr los objetivos, 3) la asignación de cada agrupamiento a un administrador con la autoridad necesaria para supervisarlo (delegación) y 4) las medidas para coordinar horizontalmente (en el mismo nivel organizacional o en uno similar) y verticalmente (por ejemplo, las oficinas centrales corporativas, la división y el departamento) en la estructura organizacional (…)”

De acuerdo con lo anterior es porible afirmar que si se dispone de un personal correctamente formado y competente, cualquier organización funciona. Sin embargo esto no es suficiente, ya que aparte del deseo de cooperar entre sí, para trabajar de forma efectiva, todos deben conocer el papel que deben cumplir y la forma en que sus funciones se relacionan unas con otras.

Es por esto que la organización como tal requiere de la definición de una estructura claramente definida y formalizada de puestos de trabajo.

Adicionalmente, resulta importante establecer una distinción entre lo que múltiples autores han denominado “Organización Formal” y “Organización Informal”. Davis (1985) describe esta última como “una red de relaciones personales y sociales no establecidas ni requeridas por la organización formal, pero que se producen espontáneamente a medida que las personas se asocian entre sí”

Entre tanto, según con Weihrich y Koontz (2003), “... la organización formal significa casi siempre la estructura intencional de papeles en una empresa formalmente organizada. Sin embargo, describir una organización como “formal” no significa que hay algo inherentemente inflexible o indebidamente limitante de ella...”

Por otra parte, es necesario resaltar que no existe una fórmula perfecta o estándar para organizar las empresas. Ya que depende de múltiples factores internos y externos tales como: productos o servicios ofrecidos, procesos misionales, talento humano requerido, tecnología dura y blanda requerida, mercados nacionales e internacionales, entre otros. Sin embargo, los teóricos de la administración han definido algunos tipos de estructuras organizacionales según el estilo de departamentalización que utilizan. A continuación se mencionan algunas de ellas:

a) Departamentalización por Tiempo: Esta es “una de las formas más antiguas de departamentalización, utilizada generalmente en los niveles inferiores de la organización, consiste en agrupar las actividades con base en el tiempo. El uso de turnos de tareas es común en muchas empresas donde por razones económicas, tecnológicas u otras, el día normal de trabajo no es suficiente.”

Un claro ejemplo de este tipo de organización son las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud, en las cuales se debe velar por el bienestar de los pacientes internos las veinticuatro (24) horas del día, siendo una actividad continua y casi imposible de detener.

b) Departamentalización por funciones de la empresa: La cual agrupa las actividades básicas de la empresa: Producción, Ventas y Finanzas. Este tipo de departamentalización “es el criterio más ampliamente utilizado para organizar las actividades y existe en casi toda empresa en algún nivel de su estructura organizacional.”

c) Departamentalización Territorial o Geográfica: Común en empresas que tienen operaciones en distintas y amplias áreas geográficas, conocidas comúnmente como Multinacionales. Mediante este tipo de organización, las actividades de determinado territorio son agrupadas y asignadas a un administrador o gerente.

d) Departamentalización por Clientes: Agrupa las de actividades que reflejan un interés particular en los clientes de la empresa. Se utiliza principalmente para atender las necesidades de nichos de mercado claramente definidos.

e) Departamentalización por Proceso o Equipo: “En esta clase de departamentalización se reúne a los empleados y a los materiales con el fin de llevar a cabo una operación en particular.”

f) Departamentalización por Producto: Consiste en la agrupación de actividades con base en productos o líneas de producto.

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