BIOGRAFÍA: Arguimiro Antonio Suárez

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LA SEGURIDAD

U N E S

CUMANÁ, ESTADO SUCRE

BIOGRAFÍA:

SUÁREZ ARGUIMIRO ANTONIO

FACILITADOR. ERYCK TINEO

DISCENTE:

ARGUIMIRO ANTONIO SUAREZ

C.I. 9979669

AMBIENTE: 4

Cumaná, Mayo 2013

BIOGRAFÍA: Arguimiro Antonio Suárez

Soy una persona que nací un día viernes a las diez de la noche del primero (1º) de Abril del año 1966 en la calle Castellón de la ciudad de Cumaná, me pusieron por nombre Arguimiro Antonio Suárez; vengo de una familia humilde, católica con valores excelentes; mis padres fueron Pastor Villarroel y Evelia del Carmen Suárez, soy el ultimo de dieciséis hermanos por parte de mi madre, entre papá y mamá somos cuatro hermanos, yo soy el menor y por parte de mi padre soy penúltimo de diez hermanos mas. Quedé huérfano de madre a la edad de cuatro años, por esa razón no tengo recuerdos de ella como tal. Fui criado por mis hermanas y mi padre en la calle San Rafael de esta ciudad. Actualmente tengo 47 años de edad, soy casado; mi esposa se llama Denisse Josefina Mayorca de Suarez, tengo cinco hijos; dos en una antigua pareja y tres con mi esposa.

Mi infancia no fue muy feliz, porque siempre sentí la necesidad de tener a mi madre cerca de mí. Estando todavía muy pequeño ocurrió una tragedia natural en Cumaná, el rio Manzanares se metió en la ciudad afectando muchos barrios y el barrio donde yo habitaba fue muy afectado y por eso nos desalojaron y nos ubicaron en la escuela normal “Pedro Arnal”; estando allí enfermé gravemente por una infección intestinal y fui hospitalizado en la antigua Cruz Roja, ubicada en la avenida Bermúdez, para ese entonces nos reubicaron en unas casas que se hicieron en el gobierno de Rafael Caldera, en la urbanización “Fé y Alegría” sector 3, vereda 28 nº 25. En la etapa de la escuela primaria fui un niño muy inquieto porque no me gustaba ir a la escuela, los compañeros se burlaban de mi, recuerdo que estudiaba en la escuela de Fé y Alegría, donde daban clases las monjas. Fui muchas veces castigado, me arrodillaban sobre chapas de refresco cuando no quería hacer las tareas, muchas veces me escapaba o inventaba a mi hermana o a mi papá que no había clases o que yo había llegado tarde y el portón de la escuela ya estaba cerrado, me quedaba jugando metras o el volteadito y cuando llegaba a la casa me castigaban y pegaban. Repetí dos veces el tercer grado; recuerdo que una de mis hermanas llamada Fabiola, al ver que yo no quería avanzar en la escuela, decidió junto a su esposo Octavio Mujica, llevarme a vivir con ellos en el pueblo de Sabana de Piedra en Caripe, estado Monagas. Mi padre quedo muy triste, porque a pesar de que trabajaba muy duro y casi nuca lo veía, el me quería mucho. Estando ya en el pueblo me pusieron a estudiar, fueron momentos muy duros para mí, porque primero estaba lejos de mi hogar y segundo me pusieron muchas reglas y también recibí muchos castigos de parte de mi hermana; pero a la vez viví momentos inolvidables, entre ellos fue cuando me enamoré por primera vez, que fue de mi maestra que me daba cuarto grado, tenía yo para ese entonces doce años. Siempre fui muy tímido y no hablaba mucho. Estudie hasta el sexto grado en ese pueblo, forme parte de un equipo de futbol y fui bastante premiado en los campeonatos que se realizaban. Cuando ya tenía dieciséis años me regresé para Cumaná y como no tenia quien me orientara porque mi papá era un hombre que se la pasaba fuera trabajando, no seguí estudiando; hasta que un día llego mi cuñado Octavio Mujica, (ya tenía dieciocho años) me dijo que si yo quería ir a pasear con él y lo que hizo fue llevarme hasta el Conscripto y me dejo allí para que cumpliera el servicio militar, era un 1º de Enero del año 1986, recuerdo que llore y rogué y hasta mi padre fue hasta allá por mí, porque yo no quería quedarme allí; pero mis hermanas me dijeron que era lo mejor para mí. En la actualidad agradezco ese gesto de mi cuñado, porque por eso no tome un mal camino.

Ingrese a las Fuerzas Armadas Nacionales, al Centro de Adiestramiento de Infantería de Marina (CAIM) en Carúpano. Fue una etapa también bastante difícil porque también recibí muchos maltratos durante el servicio militar, pero que logré luego superar. Egresé con una jerarquía de Cabo Primero con una conducta irreprochable, el mes de Abril de 1988.

En las salidas libres que tenía durante el servicio militar, cuando regresaba a la casa tuve un romance con una mujer llamada Alicia Cova, con ella tuve mis dos primeros hijos, una hembra y un varón, sus nombres son: Adriana Evelyn y Adrian Antonio.

Un tiempo después de haber salido de baja de la Marina, ingrese a las filas de la Fuerza Armada Policial, específicamente un Primero de Agosto del año 1988. Como funcionario policial he tenido muchas experiencias de trabajo, unas buenas otras desagradables, pero aprendí que en la función de trabajo, son solo experiencias que uno va absorbiendo. Conocí a muchas personas, de las cuales la mayoría han sido mis amigos hasta ahora, que recuerde no tengo enemigos, porque he sabido comportarme en mi trabajo y fuera de él. Trabaje en muchas instituciones de las cuales salí con buenas referencias. Estando laborando en el Mercado Municipal, siendo ya Cabo Primero, conocí a la que es mi querida y amada esposa; ya tenía laborando ocho años, fue un mes de Enero del año 1996, recuerdo que me la presento un oficial, ella había ido a almorzar con él; luego estuvieron de visita en mi casa y fue allí donde comenzó nuestro romance, que fue muy corto, por cierto, porque me case con ella a los cuatro meses de habernos conocido, un 20 de Abril de 1996, tenía yo treinta años de edad. Ya tengo dieciséis años de casado, tengo con mi esposa tres hermosos hijos, dos varones y una hembra; sus nombres son: Omar Jesús, Evelia del Carmen y Ángel Daniel. Mi vida al lado de mi esposa ha sido llena de muchas experiencias, he aprendido con ella el valor del amor y de la amistad, nos ha tocado aprender mucho de las experiencias vividas. De las cosas que más me han marcado en esta etapa de mi vida son, primero, la muerte de mi padre, que yo ya siendo hombre, era a él a quien le confiaba mis cosas, mis sentimientos; fue muy dolorosa para mí su muerte. Lo otro fue el nacimiento de mi hijo menor Ángel, el cual se vio muy grave al tercer día de nacido, fueron momentos difíciles; pero gracias a Dios el supero la enfermedad y eso como otras muchas cosas nos ha

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