Control y tratamientos fitosanitarios en el cultivo del pimiento

Control y tratamientos fitosanitarios en el cultivo del pimiento

Manuel Llanos Company. Ingeniero agrónomo.

El cultivo comercial del pimiento está presente en la mayoría de las regiones y países de clima

cálido o templado del mundo. Las diferentes condiciones ambientales, formas de explotación,

tipos y variedades en cultivo, ofrecen una diversidad de oportunidades a un buen número de

plagas, enfermedades y fisiopatías que pueden ocasionar mermas importantes en calidad y

rendimiento de cosecha.

Para su control, además de los tratamientos directos en fase preventiva o curativa, cabe el recurso a

técnicas de cultivo y de lucha biológica siempre que resulten eficaces, viables y económicos. Todos

los medios utilizados deberán integrarse en un plan racional y ordenado de actuación que permita

alcanzar los mejores resultados a un precio asumible, tanto desde el punto de vista económico, como

en costo medio-ambiental.

Entre los métodos culturales, que pueden considerarse alternativos o de apoyo a los tratamientos

químicos, destacan la limpieza de restos de cosechas y malas hierbas, un abonado equilibrado (sin

exceso de nitrógeno), riegos ponderados (evitando el encharcamiento) y la alternancia y asociación

con cultivos no receptivos a los parásitos y enfermedades que se trate de controlar.

El uso de mallas protectoras de alta densidad en los invernaderos, resulta efectivo para evitar la

aparición de plagas (áfidos y trips) que, además de los daños propios, pueden actuar como vectores

en la propagación de enfermedades víricas. El acolchado entre las líneas del cultivo con plásticos

reflectantes se ha mostrado eficaz como repelente de los áfidos.

La solarización o la desinfección por vapor de agua previa a la siembra o el cultivo en semillero o

invernadero, son métodos que evitan problemas de contaminación y riesgos de fitotoxicidad,

asociados a veces al uso de fumigantes químicos, y que pueden sustituir o complementar a estos,

según el grado de infestación de los suelos.

Por último, el empleo de semillas certificadas y el de cultivares resistentes o tolerantes a las

enfermedades más frecuentes en pimiento, así como la eliminación de plantas con síntomas de

ataques por plagas o enfermedades (en semillero, en trasplante o en campo), son métodos preventivos

de gran eficacia a los que habrá que acudir en un programa de lucha integrada.

Tratamientos químicos y lucha biológica contra plagas

La lucha contra las plagas del pimiento por métodos biológicos cuenta con un amplio espectro de

depredadores y parásitos, así como de microorganismos patógenos, que atacan o viven a expensas de

algunas de ellas. La utilización de estas especies auxiliares contribuye a mantener un equilibrio

natural del que se beneficia el cultivo y el medio ambiente, al poderse reducir la intensidad de los

tratamientos con pesticidas químicos.

Algunos pesticidas pueden combinarse con la utilización de especies auxiliares, al resultar éstas

inmunes a sus materias activas. Otras veces, los tratamientos químicos resultan letales para éstas, por

lo que la conveniencia de la lucha química o la biológica deberá decidirse según la intensidad del

http://www.eumedia.es/articulos/vr/hortofrut/83pimiento.html (1 de 4)26/08/2004 02:39:28 p.m.

Cultivo del pimiento

ataque, estado del cultivo, etc. Con frecuencia la eficacia y rapidez de acción del pesticida se

imponen a los métodos de lucha biológica.

Veamos algunas de las plagas más importantes del pimiento y los métodos de control biológico y/o

químico con que se pueden controlar.

• Ácaros.

- Araña roja: en invernadero ha dado buen resultado la suelta asociada de dos insectos fitoseidos

(Phytoseiulus persimilis y Amblyseius andersoni). Como alternativa química al tratamiento biológico

se puede recurrir a formulaciones a base de dicofol +tetradifón, dienocloro, fenbutestán, etc.

- Araña blanca: tratamientos químicos con azufre micronizado, endosulfán, fenbutestán, dicofol +

tetradifón.

• Áfidos (pulgones): entre las especies auxiliares depredadoras de los áfidos destacan: coccinélidos

(mariquita común y otras), crisópidos (Chrysopa septempunctata y otras), sírfidos (Metasyrpus

corollae y otras), etc. Como materias activas (m.a.) para tratamientos químicos compatibles con

insectos auxiliares: etiofencarb, acefato, pirimicarb, heptenofós, piretroides (no todos), metomilo y

malatión.

• Moscas blancas. En lucha biológica: himenópteros (Encarsia formosa y otras), míridos

(Macrolophus caliginosus y otras), hemípteros (Orius laevigatus, etc.)... Además algunos hongos

patógenos como Verticillium lecanii, V. dahliae, etc. Entre los insecticidas más empleados:

piretroides, metomilo, endosulfán, teflubenzurón, etc. Conviene alternar el uso de m.a. para evitar la

aparición de resistencias en el parásito.

• Trips: existen numerosos enemigos naturales de los trips. Entre ellos, varias especies de hemípteros

antocóridos, ácaros fitoseidos, tisanópteros (trips), etc. En invernadero se han utilizado Orius

insidiosus, O. laevigatus, Ambliesius cucumeris y A. barkeri. También han dado resultado

biopreparados patógenos para los trips a base de hongos Verticillium y otros. En tratamiento químico,

algunos piretroides (cipermitrín, ciflutrín, bifentrín, etc.), carbamatos y organofosforados. Conviene

alternar las formulaciones para evitar crear resistencias en el parásito.

• Lepidópteros (orugas de mariposas): constituyen un extenso grupo de parásitos del pimiento que

atacan en estado de larva (oruga) diversos órganos de la planta. Entre ellos destacan: rosquilla negra,

gardama, medidor, gusano de cuerno del tabaco, gusano de cuerno del tomate, plusia, gusano verde,

gusano de la flor del pimiento, gusanos grises.

Hay un amplio grupo de enemigos naturales de estas plagas a las que atacan en sus estados de huevo,

larva o crisálida. Entre los depredadores: la ya citada "mariquita común", especies de Orius, y el

neuróptero Chrysoperla carnea. Como parásitos: algunos himenópteros icneumónidos, como

Hypogaster didymator, que pone sus huevos en las larvas; otros himenópteros, como Apanteles

flavipes; y Trychogramma evanescens o T. dendrolini, que

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