La Silla Del Aguila
Enviado por asaerwqa • 2 de Abril de 2014 • 426 Palabras (2 Páginas) • 317 Visitas
Pero el juego fue desafortunado. El libro
El príncipe de Niccoló Machiavelli es un tratado
de lo que debe ser la política; La silla del
águila fue una novela de lo que fue la política
en un caso concreto. En todo caso, la novela
de Fuentes quiso tener a veces un aire de
El padrino, de Mario Puzo, porque se trataría
de una perversión de la política. Situada en
el año 2020, el intercambio de cartas ocurrió
porque el gobierno de Estados Unidos había
castigado al de México por la falta de apoyo
a la invasión estadunidense a Colombia y el
regateo de petróleo mexicano. Como sanción,
Washington desconectó los satélites que usaba
México y con ello rompe con todo tipo de
comunicaciones. Los mexicanos, en consecuencia,
regresaron a los tiempos de las cartas
entregadas por mensajeros. Aquí Fuentes falló.
A pesar de su experiencia literaria, Fuentes
no logró conformar un discurso de novela
porque los personales no pudieron definir un
contorno creativo. Tampoco pudo explotar la
riqueza literaria del género epistolar tan rico
en sus posibilidades pero al mismo tiempo tan
desafiante en sus exigencias estilísticas.
Fuentes no creó personajes autónomos.
Todos dependieron de sus propias definiciones.
La mano del autor fue obvia. Los personajes
literarios, así, resultaron meros pretextos para
dar a conocer los pensamientos del autor. En la
literatura eso ocurrió con frecuencia --“Emma
Bovary son yo”, declaró Gustav Flaubert--,
pero la solidez de las invenciones se sustentó
en la capacidad de dotar a los personajes de
autonomía literaria. Fuentes operó como el
ventrílocuo de sus personajes. Al terminar el
libro, el lector se queda con la impresión de
que no leyó una novela --el mundo autónomo
de la literatura-- sino que dispuso de un rosario
de aforismos, frases, anécdotas, pero contadas
por una misma voz con diferentes nombres sin
cumplir con las reglas de la autonomía de los
personajes, como si la prioridad fuera decir, no
contar. Si Machiavelli convirtió a su príncipe
en una versión de “si yo fuera hombre de poder”,
Fuentes escribió La silla del águila para
lamentarse del mundo político que vivió y que
avaló. Y peor aún: como un reclamo a los priístas
que ejercieron el poder y llevaron al país a
la decadencia, la debacle y la descomposición
La novela La silla del águila quedó, pues,
como una requisitoria de corresponsabilidad.
Toda la fauna de la política mexicana desfila
en el libro: presidentes, consejeros, gabinetes,
gobernadores,
...