Los Pochtecas Y Yacatecutli

Los Pochtecas

Los Pochtecas eran comerciantes de larga distancia que estaban al servicio del emperador Mexica, eran los únicos que tenían el permiso de ir fuera del imperio con el fin de comerciar, se movían a cualquier parte de Mesoamérica que desearan debido a sus privilegios. Se encomendaban a su dios Zacazontli para que los protegiera en sus viajes.

Estos eran parte de una organización jerárquica, y para poder ser capaces de subir en las escalas, debían distinguirse y cumplir con algunas ceremonias.

También tenían la función de ser embajadores y a la vez espías para el imperio bajo las ordenes del Huey Tlatoani; mismos que habían alcanzado un estatus especial por las riquezas que poseían. Este gremio tenía algunos ritos y algunas costumbres especiales para ellos, además de que podían tener tierras en forma individual.

Debido a los privilegios de los que gozaban estos mercaderes, algunas veces eran acompañados de guerreros aztecas en sus viajes para comerciar, con el fin de protegerlos de los peligros que pudieran existir.

Eran tratados por un tribunal de justicia diferente a los demás.

Yacatecuhtli

Tiene su origen en Pochtlan, que se encontraba al sur de Xochimilco; Yacatecuhtli era la deidad de los mercaderes o comerciantes, su nombre proviene de Yaque (mercader) y tecoanime (comerciante). Se dice que se le tenía especial veneracion al báculo que usaba para apoyarse al caminar, que estaba hecho de caña maciza sin nudos, llamado xauactopilli.

La forma de este dios es un indio que camina usando, como ya se menciono, su báculo, con la cara manchada de blanco y negro, con plumas atadas en el cabello, el cual lo llevaba recogido, lleva orejeras de oro, cubierto con una manta azul y una manta negra además, la cual es llamada quechintli, con flores tejidas. Usaba unas sandalias, mejor conocidas como cotaras, el báculo lo llevaba en la mano derecha.

Se dice que el fue quien inicio los tratos y mercaderías entre esta gente, por lo cual se le comenzó a tratar como a un dios y se le comenzó a honrar de diversas formas, así como a su báculo.

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