Sexenio Vicente Fox

Capitulo I. Recuento de los antecedentes de P.E previos a Vicente Fox (Sexenio del Lic. Ernesto Cedillo)

Interés nacional 1995-2000

Bajo estas condiciones internas y externas, el interés nacional para 1995 no era difícil de definir. En la esfera social, era necesario mejorar las condiciones de vida de millones de mexicanos para reducir la brecha extrema entre ricos y pobres y proporcionar justicia social pera los sectores más vulnerables. En el área económica, era necesario estimular un crecimiento equilibrado de la economía a través de la creación de más empleos y mejores salarios, y entender el problema de la carga de la deuda externa mexicana. En la arena política, era necesario mejorar el sistema político mediante un gobierno más democrático; entender el problema de la corrupción y limitar el poder presidencial buscando un mejor sistema de balance de poderes. En este sentido, los objetivos de la política exterior mexicana debían estar orientados a tratar de resolver esos problemas.

El plan nacional de desarrollo 1995- 2000, el gobierno mexicano propuso cinco objetivos fundamentales, los cuales podían ser considerados como la interpretación oficial del interés nacional:

I. Fortalecer el ejercicio pleno de la soberanía nacional como valor supremo de nuestra nacionalidad y como responsabilidad primera del estado mexicano.

II. Consolidar un régimen de convivencia social regido plenamente por el derecho, donde la ley sea aplicada a todos por igual y la justicia sea la vía para la solución de conflictos.

III. Construir un pleno desarrollo democrático con el que se identifique todos los mexicanos y sea base de certidumbre y confianza para una vida política pacifica y una intensa participación ciudadana.

IV. Avanzar a un desarrollo social que propicie y extienda en todo el país, las oportunidades de superación individual y comunitaria, bajo los principios de equidad y justicia.

V. Promover un crecimiento económico vigoroso, sostenido y sustentable en beneficio de los mexicanos.

Como podemos ver, hay algunas coincidencias entre la interpretación oficial del interés nacional y del que resulta de las condiciones internas y externas. Antes de que estallara la crisis de 1994, el presidente Ernesto Zedillo declaro en su discurso de toma de posesión:

“Como jefe de estado, mi primera responsabilidad será velar por la soberanía nacional… México es una nación respetada en el mundo…. La autodeterminación de los pueblos, la solución pacifica de las controversias, la igualdad jurídica de los estados y la equidad en los intercambios entre los países, son principios que han orientado nuestra política exterior y nos dan autoridad moral en el mundo. Mantendré la aplicación de esos principios, para preservar la soberanía nacional y promover los intereses legítimos de México en el mundo.

Lo hare, practicando un nacionalismo activo y abierto, respetuosos de todas las naciones.

Defenderé muy especialmente, con legalidad y firmeza, la dignidad y los derechos humanos de los mexicanos que se encuentran mas allá de nuestras fronteras.”

Este discurso significaba que la administración de Zedillo se apegaría, al menos en palabras, a los principios tradicionales de política exterior. El plan nacional de desarrollo señalaba que los objetivos de política exterior mexicana serian:

1. Fortalecer la capacidad del estado para garantizar nuestra seguridad nacional y el imperio de la ley en todo el territorio mexicano.

2. Recuperar, preservar y hacer valer la nueva estatura política y el mayor peso económico de México frente a los centro de la economía mundial y en los foros multinacionales.

3. Asegurar que la política exterior bilateral, multilateral y de cooperación respalde y refleje más efectivamente los intereses del país.

4. Asegurar una vinculación estrecha de las comunidades de mexicanos y de origen mexicano en el exterior con el país.

5. Promover posiciones internacionales acordes con las transformaciones internas respecto a los grandes temas mundiales: la estabilidad financiera internacional, el libre comercio, la migración, la democracia, los derechos humanos, el narcotráfico, el terrorismo y el cuidado del medio ambiente.

Conclusiones

Es posible identificar algunas de las características principales de la política exterior de México durante los siglos XIX y XX.

1) Durante la mayor parte del siglo XIX y principios del XX, la política exterior de México estuvo determinada fundamentalmente por su pasado histórico. Las agresiones externas presiones e intervenciones extrajeras directa o indirectamente afectaron el curso de la actualidad internacional del país.

2) Debido a lo anterior, México fue defensor de los principios de la no intervención, la autodeterminación de los pueblos, la igualdad jurídica de los estados, la solución pacifica de las controversias internacionales y el apego al derecho internacional. La experiencia histórica llena de agresiones e intervenciones externas formaron los principios tradicionales de la política exterior de México, los cuales se incluyeron el propia constitución del país. Es decir, por ese pasado y la debilidad estructural el país, la política exterior de México adquirió un enfoque idealista desde la perspectiva de la teoría de las relaciones internacionales.

3) Durante la etapa liberal, principalmente la que encabezo Porfirio Díaz, la política exterior de México fungió con instrumento básico para el desarrollo de la economía del país. Esta política propicio el ingreso de grandes capitales extranjeros para la instalación de diversas empresas en el país. Durante la revolución uno de los principales objetivos de la política exterior fue reducir la influencia del sector externo en la economía nacional.

4) Sin duda, una de las características principales de la política exterior mexicana durante estos siglos fue que estados unidos ocupo un papel primordial en su proceso de formulación. De esta manera, no se pueden entender varios acontecimientos nacionales sin incluir al factos estadounidense. Inclusive, muchas de las relaciones exteriores de México con el resto del mundo dependían, de cierta manera, de la relación bilateral con el vecino del norte.

5) Durante el cardenismo

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