Bolívar en Bolivia

Bolívar en Bolivia

La participación de Simón Bolívar en la naciente República de Bolivia, es en honor a su libertador, ya que luchó utilizando estrategias pertinentes para lograr triunfos contra rebeldes que tenían oprimido al continente americano.

Cuentan en textos de historia, que El triunfo en Ayacucho aseguró la emancipación no sólo del Perú, sino de todo el continente americano. Por la noche, el virrey La Serna firmaba la Capitulación de Ayacucho, reconociendo así la independencia del Perú.

En la Guerra de la Independencia del Alto Perú, que dio como resultado la creación de Bolivia, se registraron distintas etapas, pero las más relevantes, son la 3ª y 4ª, 5ª etapa, las cuales indican:

• 3ª Etapa: se identifica como la del dominio realista en el Alto Perú. Corre entre 1816 y 1823 y se caracterizó por enfrentamientos aislados entre los ejércitos del Rey y los grupos guerrilleros. En esta etapa, los principales hechos de la guerra se desarrollaron fuera de Charcas. Obtuvieron su independencia Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Chile gracias a las acciones de los ejércitos de Bolívar, por el norte, y San Martín, por el sur.

• 4ª Etapa: entre 1823 y 1824, los ejércitos realistas se enfrentaron entre sí en una Guerra Interna entre absolutistas y liberales. Esta situación debilitó profundamente a su facción, beneficiando a los patriotas.

• 5ª etapa: es la del triunfo de los ejércitos bolivarianos en el Perú, entre agosto y diciembre de 1824, y de la consolidación de la independencia del Alto Perú, en agosto de 1825.

Luego de la Declaración de Independencia, la nueva nación inició un complejo y largo proceso de consolidación y organización del Estado. El 6 de agosto de 1825, una asamblea reunida en Chuquisaca, determina que el Alto Perú sea independiente y que se cree una República con el nombre de Bolivia, en homenaje al Libertador.

Congreso de Panamá

Asamblea convocada por Simón Bolívar en la ciudad de Panamá, para crear una federación de países hispanoamericanos independientes. Se desarrolló entre el 22 de junio y el 5 de julio de 1826 y contó con la participación de la Gran Colombia, México, Perú, Bolivia y Guatemala. Enviaron observadores Gran Bretaña y los Países Bajos, pero no acudió Estados Unidos, que había sido invitado. Se acordó un tratado perpetuo de unión y confederación, la creación de un Ejército interamericano para la defensa común y la renovación bianual del Congreso, al que se podrían sumar otros países. Debido a las rivalidades entre los distintos países y a la oposición de Estados Unidos, que no deseaba la formación de un sistema de estados federados en América del Sur, los acuerdos sólo fueron ratificados por la Gran Colombia y no tuvieron consecuencias efectivas. Logró reunirse en una segunda ocasión, a convocatoria de México, muy pocos años después.

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