CAMBIO CLIMATICO

Cuando hablamos del cambio climático nos referimos a los cambios que se producen en la variación global del clima de la tierra, variaciones influidas por la temperatura, las precipitaciones y la nubosidad, sin embargo, actualmente también utilizamos el término de cambio climático para referirnos a los cambios que ha producido el hombre con el consumo excesivo sobre los recursos naturales.

El aumento considerable de temperatura en los últimos años ha generado una alerta generalizada y ha puesto de manifiesto que la tierra donde vivimos está en peligro. Es pues evidente, que hay que tomar medidas para evitar la progresión del calentamiento global, y si hace falta, reducir los efectos.

En el 2010, todo el mundo tuvieron los ojos puestos en la ciudad de Copenhague donde se habían reunido 192 representantes de diferentes países del mundo para discutir un acuerdo internacional y para redactar el nuevo Protocolo que sustituirá el de Kyoto, vigente hasta el año 2012.

Desgraciadamente, la cumbre empezó siendo un fracaso, porque los EEUU se negaron a reducir la emisión de gases de efecto invernadero por el año 2020. Además, muchos de los líderes de los países industrializados muestran una falta de voluntad política para adoptar medidas significativas en la lucha por el cambio climático.

Antes, hay que preguntarse qué es el que provoca este cambio climático. Básicamente, el calentamiento global es el proceso, en de aumento gradual con los años, que produce un aumento de la temperatura del planeta llamado efecto invernadero. En un futuro, este aumento provocará, entre otros efectos, la elevación del nivel del mar, cambios en el régimen de precipitaciones, aumentos en la intensidad del clima externo, retroceso de los glaciares y la extinción de muchas especies.

Además, uno de los motivos del aumento de temperatura es causado por el incremento de las emisiones de dióxido de carbono (CO2). Este incremento es generado por el efecto humano en las emisiones contaminantes de los automóviles, las fábricas, la combustión de fósiles (carbón, gasolina del petróleo, gas natural, etc.), los aerosoles de sulfato y las emisiones de gas metano (presentes en la agricultura, abonos o estiércoles).

¿Y qué podemos hacer para evitar el cambio climático y tomar medidas urgentes? Haría falta que los gobiernos de los diferentes países del mundo cooperaran más entre ellos y se pusieran de acuerdo para conseguir vencer la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. También tendrían que conseguir que las energías renovables, como por ejemplo, la energía solar y la eólica, fueran las que sustituyan a las energías más contaminantes.

Así pues, con medidas preventivas significativas se podrían controlar las temperaturas para evitar el calentamiento global. Por ejemplo, los gobiernos podrían invertir al hacer cambios en la producción de energía, el transporte y

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