CAPÍTULO 10. SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA

CAPÍTULO 10. SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA

La salud es un proceso dinámico, individual, continuo, multidimensional, de bienestar, realización, entusiasmo por la vida, aprovechamiento de oportunidades, armonía integral y con el entorno.

La sexualidad es ante todo  una abstracción, una construcción mental de una parte muy importante de la existencia humana;  está presente en todas las etapas de nuestra vida, desde el nacimiento hasta la vejez.

También ha sido entendida como el conjunto de características bilógicas, psicológicas y socioculturales que nos permiten comprender al mundo y vivirlo a través de nuestro ser como hombres o como mujeres. Y no puede ser considerada como un hecho aislado, natural e inmutable, producto de disposiciones bilógicas.

Descrito por Eusebio Rubio, la sexualidad humana es el resultado de la integridad de cuatro holones o subsistemas sexuales: la reproductividad, el género, el erotismo y la vinculación afectiva interpersonal; que funcionan integralmente.

La salud al igual que la sexualidad también está influida por creencias, ideologías y valores, es decir la cultura. A pesar que nos encontramos iniciando el tercer milenio aún seguimos siendo portadores de prejuicios que oscurecen el concepto de salud sexual, así como los derechos sexuales y reproductivos de hombres y mujeres.

NORMALIDAD VS. ANORMALIDAD

El intento de definir lo que es sexualmente “normal” y lo que no lo es constituye uno de los dilemas más confusos de la sexología actual. Por lo que hace hincapié en el cumplimiento de una pauta establecida, que se asocia con el bienestar que fue influenciado por un enfoque médico.

En un tiempo, el concepto de salud se consideró como la ausencia de enfermedad, para después evolucionar hacia el concepto actual, es decir, el completo estado de bienestar físico, psicológico y social. Sim embargo, en relación con la sexualidad es importante hablar un poco sobre la enfermedad y principalmente sobre los criterios que los profesionales de salud utilizan.

Se denominaron valores normales a los que estaban dentro de la norma estadística de frecuencia. Por lo que si se encuentra dentro de las constantes se considera normal y si están por debajo o rebasan estos valores se convierten en indicativo de enfermedad, por lo que normal es sinónimo de salud.

Categorizar y definir la palabra “normal” o “natural” no es fácil de enfocar, más a la esfera sexual, ya que el ser humano tiende a categorizar los fenómenos menos que percibe, por lo que pueden existir varios enfoques.

El proceso de sociabilización obligó al hombre a hacer suyos los valores de la comunidad; por lo que se hizo necesario dividir las conductas en “deseable” e “indeseable”. En una época el enfermo mental era poseído por el demonio y debía ser apartado de la sociedad como “desviados” o “enfermos”.

Un ejemplo claro que muestra cómo un mito puede ser causante de ansiedad, sentimientos de culpa, depresión y con ello disfunciones sexuales (eyaculación precoz y disfunción eréctil) y problemas de pareja es el de la masturbación, que ha sido motivo de inquietud social y censura  de la tradición judeocristiana.

Aunque a través del tiempo a la masturbación la considerado algo moralmente inaceptable y causante de enfermedades mentales (coprofilia, gerontofilia, pedofilia, necrofilia, fetichismo, etc.). Hoy en día, desde el punto de vista científico, sabemos que la masturbación es nuestra primera actividad sexual. La manera en que se empieza a responder sexualmente, en el que se aprende a amar y dirigir la propia autoestima.

Uno de los objetivos de la sexología moderna es el constituir una disciplina científica, es decir objetiva, descriptiva y libre de prejuicios que estimule una actitud positiva ante la vida, la búsqueda del conocimiento, el desarrollo personal, la confianza y la autodeterminación que permitan desarrollar en plenitud los potenciales corporales, psicológicos, sociales y efectivos; además de que le permite ayudar a superar la cultura del miedo y la culpa basada en la desinformación y la ignorancia.

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