Salud Sexual Y Reproductiva

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eza un adagio popular: “el hombre aprende de sus errores” , aunque no siempre, diríamos nosotros. Sin embargo, vale la pena precisar que este aprender de los errores implica reconocer qué se hizo mal o qué estaba mal.

Entonces debemos iniciar por RECONOCER que nuestra forma de aprender o aprendizaje no es el más adecuado o sistemático que debería ser. Nos adelantamos a reconocer que hay alumnos, maestros y público en general, que a estas alturas, sí tienen un hábito o un estilo de aprendizaje y, lo que es más, lo utilizan cotidianamente. Bien por ellos. Hecho esta salvedad, orientaremos nuestro público objetivo a quienes están en la búsqueda o en el propósito de hallar su propio estilo de aprendizaje que los conlleve a arribar a puerto seguro.

Ante el posible desánimo o indiferencia que involucra a la mayoría de personas en estos tiempos, aduciendo la dificultad e indefinición del presente, apelamos a la RESILIENCIA como “la capacidad que nos permite reconocer la adversidad y enfrentarla de la mejor manera posible” , como sustento para embarcarnos en esta AVENTURA que significa APRENDER, aun en tiempos difíciles.

Partamos de que la forma de aprender de nuestros abuelos o padres, no es el mismo que estos tiempos exigen. La referencia al tiempo pasado es porque hace décadas el desarrollo del conocimiento era más o menos estático, por lo tanto poco o nada variaba o cambiaba en muchos años, por lo tanto había que recurrir más a la memoria que a otras habilidades o estrategias.

En pleno Siglo XXI las cosas han cambiado enormemente, porque la cantidad de conocimientos existentes a la actualidad es tal que ni la vida completa de una persona alcanzaría para dicho conocimiento. De ahí que muchos coinciden en llamar a esta época como la era o la sociedad del conocimiento. Enfrentar esta realidad, requiere de un conjunto de estrategias y/o habilidades que nos permitan acceder, mínimamente a lo elemental o imprescindible de dichos conocimientos.

Lo que debe estar preguntándose usted amigo lector es y ¿Cómo hago para aprovechar al máximo mi tiempo?, para seguir aprendiendo y aprendiendo bien. En realidad existen muchas propuestas como tantas páginas Web pueda encontrar en INTERNET, sin embargo todos coinciden que uno de las herramientas imprescindibles es la LECTURA, y podrá aprenderse mucho o nada si es que no se lee, pero leer bien.

Así que Lo que a continuación le presentamos es producto de una y más lecturas que ponemos a vuestra consideración:

NO TODOS APRENDEMOS DEL MISMO MODO

Antes los docentes, o acaso hasta ahora, utilizaban la pizarra tiza y la voz para dictar su clase, creyendo que todos aprendían sólo oyendo.

Actualmente esta preposición ha sido descartada ya que en el aula muchos estudiantes aprenden sólo oyendo a sus profesores, otros

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