Cadena Inmunidad

Las Vacunas Comestibles: “Son Una

Realidad”

Gracias a la biotecnología hay gran variedad de avances a la salud frente a los beneficios que se les ofrece a los pacientes como por ejemplo evitarles molestias (procedimientos quirúrgicas); estos beneficios son ofrecidos por las vacunas comestibles quienes protegen al paciente de difteria, polio, tétanos, tos ferina, sarampión y tuberculosis.

Surgen debido a la gran tasa de mortalidad y lo más importante a lo que hace referencia el autor es que la población no cuenta con los recursos para obtener las vacunas que les pueden erradicar la enfermedad.

Todo esto podría evitarse con el consumo de vacunas comestibles que buscan como objetivo inmunizar a las personas sin tener que recurrir a la inyección, haciéndolo mediante la administración de una papa, plátano, tomate y lechuga.

Al principio de los años 90 Charles Arntzen, profesor de biología de la universidad de Texas fue quien dio las primeras pautas para promover dicha revolución en el área de la salud con una vacuna comestible; es aquella en la que se modifican genéticamente cualquier alimento con genes de microorganismos patógenos y lograr que estos alimentos sinteticen antígenos que a su vez proporcionen inmunidad a los que los consumen, por ejemplo, hoy es posible introducir en una lechuga un segmento de ADN para que esta exprese un antígeno de la cubierta del virus de la hepatitis B desarrollando inmunidad.

La principal preocupación fue la vía de administración debido a que realiza el primer paso de absorción y es muy posible que no llegue al torrente sanguíneo pero en contraposición a esto descubrieron que las células vegetales soportan el ataque del jugo gástrico protegiendo al antígeno.

De manera paralela se realizaron ensayos con la papa pero sus resultados no fueron los esperados debido a que la papa para su consumo debe pasar por un proceso de cocción y de esta manera perderá el agente inmunizante.

Todo esto llevo a que se decidiera practicar con otro elemento el plátano puesto que no requiere preparación previa para su consumo, es un alimento llamativo para la población infantil y es típico

En poblaciones de bajos recursos, de esta forma si podrían combatir con todos los males tanto económicos como a nivel de sector salud (sarampión, cólera, polio, hepatitis B, etc. que logran afectar nuestras naciones.

En México se realizaron estudios con ratas. De un cultivo de plátano tabasco con el antígeno para el paludismo, cáncer, cólera, hepatitis B, amibiasis y rotavirus en donde se obtuvieron excelentes resultados; solo falta la prueba en seres humanos que está íntimamente coordinada con la secretaria de salud.

Gracias a la lectura de este articulo puedo ver el inmenso de conocimiento que rodea el área de a ciencia, es evidente que sobran las ideas y las buenas intensiones pero faltan

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