Cambios climáticos y la evolución

Introducción:

La evolución es un proceso extendido en el tiempo donde las especies se adaptan a las condiciones que factores como el clima les impone. La acelerada y casi instantánea desaparición de los dinosaurios es un ejemplo perfecto  

Los dinosaurios fueron una especie que dominaba los ecosistemas en la prehistoria. Estos habitaron la tierra y existieron durante más de 160 millones de años durante la era Mesozoica.

Hace 66 millones de años, cuando los dinosaurios aún eran los reyes de la Tierra, un asteroide gigantesco, cuyo tamaño se estima en 10 kilómetros de diámetro, cambió la vida del planeta para siempre. El impacto de este asteroide, el cual cayó en la Península del Yucatán (México) -y al que se culpa de la extinción de los dinosaurios- pudo haber sumido a la Tierra en la oscuridad durante casi dos años.

El impacto directo del asteroide provoco una muerte inmediata de gran parte de los animales terrestres que ahí habitaban, pero la pérdida de luz solar, provocada por las cenizas de erupciones volcánicas e incendios que fueron producto también del choque del asteroide son una evidencia bastante importante para el análisis de la evolución por cambios climáticos, debido a que habría causado una pronunciada disminución de las temperaturas promedio, con una caída de 28ºC sobre la superficie de la Tierra y 11ºC sobre los océanos.

Mientras la superficie terrestre se enfriaba, la atmósfera en la estratosfera se volvía mucho más caliente a medida que el hollín absorbía la luz del Sol. El calor hizo que se acumulen grandes cantidades de vapor de agua, el mismo que facilitó reacciones químicas que contribuyeron a 'destruir' más la capa de ozono. Y para cuando el 'manto' de ceniza desapareció y la luz del Sol volvió a llegar a la Tierra, el planeta estaba desprotegido ante la radiación ultravioleta que 'torturó' a los sobrevivientes.  

Los cielos se iluminaron gradualmente, en cambio la fotosíntesis fue imposible durante más de un año y medio. Pese a que muchas de las plantas terrestres ya habían quedado incineradas en los incendios, la oscuridad fue causante de la improductividad de la fotosíntesis, aunque probablemente habría tenido su mayor impacto en el fitoplancton, que es la base de la cadena alimentaria oceánica. La pérdida de estos pequeños organismos podría haber devastado muchas especies de la vida marina, las que no desarrollaron los caracteres necesarios para poder sobrevivir y no extinguirse. 

La diversidad de especies vegetales se redujo drásticamente como consecuencia de las nuevas condiciones climáticas que impedían la fotosíntesis, esto también produciría efectos a las especies que sobrevivieron gracias a que vivían en el agua, aunque en su caso fue una extinción más gradual. Ciertos hongos y plantas parecidas a los helechos que fueron capaces de adaptarse a las nuevas condiciones y así heredar estos rasgos favorables a otras, fueron las que proliferaron y ayudaron en la evolución.

...