Complicaciones cardiovasculares por SAR-CoV-2

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Complicaciones cardiovasculares por SAR-CoV-2

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Docente: Dr. Neftalí Guzmán Oyarzo

Integrantes: Daniel Oyarzo

Isamar Hernández

Cristian González

Solange Molfinqueo

Rodrigo Rivera

Nataly Lara

Carrera: Química y Farmacia, sede Temuco.

INTRODUCCIÓN

A fines del 2019 y principios del 2020 se comenzó a propagar un virus que era muy poco común a nivel mundial, lo que contrajo una enfermedad de la cual no se tenía un conocimiento completo de su infección , además múltiples complicaciones. Según un estudio realizado en Santiago de chile,  se encontró que el estado socioeconómico determina la incidencia y mortalidad por COVID-19, ya que la disparidad socioeconómica influye en su prevalencia y posibles complicaciones cardiovasculares  en pacientes infectados por SARS-CoV-2, podemos identificar en el siguiente gráfico que es más prevalente en mujeres entre los 75 y 89 años de edad, en cambio, en hombres tiene mayor prevalencia de mortalidad entre los 60 y 89 años de edad.

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Su patogenia implica una infección que se inicia en el tracto respiratorio superior y progresa a las regiones inferiores del pulmón en casos graves. Las gotitas respiratorias que transportan el SARS-CoV-2 infectan las células epiteliales y endoteliales, las neuronas, la microglia y los macrófagos pulmonares que contienen la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE-2). La replicación viral y la liberación de patrones moleculares asociados al daño inducen piroptosis, provocando una respuesta inmune innata disfuncional. La liberación de agentes pro-inflamatorios puede inducir una tormenta de citocinas, lo que aumenta la vasodilatación, la permeabilidad capilar y la hipoxemia, lo que a menudo puede provocar insuficiencia orgánica múltiple. En los próximos ítems se estará explicando y argumentando con mayor información sobre aquellas afecciones cardiovasculares dadas por covid19, centrándonos más en la miocarditis.

Etiología y principales factores de riesgo

El  COVID-19 puede causar complicaciones cardiovasculares en pacientes con enfermedades cardiovasculares subyacentes y factores de riesgo cardíaco, como la hipertensión arterial, la diabetes mellitus y la enfermedad cerebrovascular ​(1)​. Además, los pacientes con COVID-19 pueden presentar lesión cardíaca aguda, determinada por niveles elevados de troponina de alta sensibilidad, que se observa comúnmente en casos graves y está fuertemente asociada con la mortalidad, al igual que el síndrome de dificultad respiratoria aguda ​(1)​. El incremento de los niveles de troponinas cardiacas, péptidos natriuréticos y dímero D son importantes al momento de emitir un pronóstico en pacientes con infección por SARS-CoV-2 (COVID-19), con un aumento en el riesgo de infarto agudo de miocardio, miocarditis, insuficiencia cardiaca, paro cardiaco, arritmias y muerte súbita ​(2)​.  

Los factores asociados con la mortalidad incluyen el sexo masculino, la edad avanzada y la presencia de comorbilidades como las enfermedades cardiovasculares. Respecto a los problemas cardiovasculares identificados por la infección de este virus están relacionados con desequilibrios del sistema renina angiotensina aldosterona, ocasionando hipertensión arterial, miocarditis, isquemias que llevan a una insuficiencia cardíaca y por ende a un agravamiento de la salud del paciente (​3)​.

La miocarditis es una inflamación del músculo cardíaco que puede ser causada por una infección viral, como la infección por SARS-CoV-2, el diagnóstico de dicha enfermedad en pacientes con COVID-19 y enfermedades cardiovasculares preexistentes se realiza mediante una combinación de pruebas clínicas, de laboratorio y de imagen. Algunas de las pruebas que se pueden realizar incluyen:  

• Electrocardiograma (ECG): puede mostrar cambios en el ritmo cardíaco y en la actividad eléctrica del corazón.
• Análisis de sangre: se pueden medir los niveles de troponina, una proteína que se libera cuando hay daño en el músculo cardíaco.
• Ecocardiograma: una prueba de imagen que utiliza ondas sonoras para crear una imagen del corazón y detectar cualquier inflamación o daño en el músculo cardíaco.
• Resonancia magnética cardíaca (RMC): una prueba de imagen que usa un campo magnético y ondas de radio para generar imágenes detalladas del corazón y detectar cualquier inflamación o daño en el músculo cardíaco.

Es importante que los pacientes con COVID-19 y enfermedades cardiovasculares preexistentes sean monitoreados de cerca para detectar cualquier signo de miocarditis u otras complicaciones cardiovasculares. Si se sospecha de miocarditis, se debe realizar un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado para prevenir complicaciones graves ​(1,4)​

Patogenia

El sistema cardiovascular se ve significativamente afectado en la COVID-19. Desde el punto de vista patogénico se han implicado diferentes mecanismos, entre los que cabe citar 3 (fig. 1). Por una parte, se ha involucrado en la lesión celular directa ocasionada por el SARS-CoV-2. En segunda instancia, se señalan los daños mediados por sus antígenos o por sus componentes estructurales. Por último, se apunta a la existencia de lesiones miocárdicas inespecíficas condicionadas por la reacción inflamatoria de base y por la respuesta inmunitaria excesiva mediada por citocinas y otros mensajeros celulares.(6)

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