EL COLOR

El Color

El color encuentra varias definiciones de acuerdo a las distintas disciplinas que lo estudian, ya sea la física, la química, la psicología, la filosofía o el arte; esta última materia de estudio es la que nos interesa dado que el cine es una expresión puramente artística. En el cine podemos conceptualizar al color llanamente como: elemento visual mediante el cual somos capaces de percibir nuestra realidad de distintas maneras gracias a la amplia gama de emociones que pueden ser evocadas por él, ya sea mediante colores cálidos que nos demuestran ira, lujuria, o en su defecto, calor, los fríos que nos hacen percibir tristeza, profundidad o misterio.

              Vivimos rodeados de una gran cantidad de colores, los cuales quizá al tenerlos presentes desde el momento que nacemos, nos han hecho acostumbrarnos para cuestionar su origen, el cual resulta tan enigmático, y difícil de definir; desde Aristóteles, que intenta definir su origen que proviene del elemento fuego el cual genera luz y esta a su vez genera que en los objetos transparentes surja lo que llamamos color, como si la luz fuera el catalizador para percibir los colores o estos se hagan presentes, y aquí es donde surgen tantas cuestiones como ¿En la oscuridad los objetos en realidad son transparentes?, ¿A qué se debe esto? Y ¿Por qué es así?, luego el científico Isaac Newton contesta a esto con diversos estudios a la energía de las vibraciones electromagnéticas o la naturaleza de los corpúsculos luminosos que originan la luz, las diferentes posibilidades de producir fenómenos de color, particularmente la descomposición de la luz blanca en colores espectrales tras su paso por un prisma y el problema del color de los cuerpos. Estudia las mezclas de luces coloreadas, los espectros de diversos elementos, el número de vibraciones y la longitud de las ondas coloreadas. Pero surgen más dudas, ¿Por qué estas ondas son visibles o especificas en esos colores? Y ¿Cómo sabemos realmente que los colores que se generan con ese fenómeno físico sea el mismo para el que ven todas las personas?, entonces es aquí donde nacen más interrogaciones a las cuales los fisiólogos examinan  las acciones operativas de la luz y de los colores sobre nuestro sistema visual - ojo y cerebro - y estudia las condiciones y las funciones anatómicas que de ello se derivan, dejando así al color como un proceso que ocurre en nuestro cerebro, pero realmente ¿Se limita a eso?, ¿Dónde queda el color en los objetos? ¿No tienen color? ¿No existe el color más que en nuestra mente?, todas estas cuestiones que la mayoría de las personas no piensan pero que forma parte de su realidad, son de mi interés y lo ha sido para muchos, teóricos, filósofos, científicos, y como al artista debe de preocuparse y poder plasmar sus ideas en su obra.

        Newton logra decir que “la luz por si misma produce la sensación de color…así como tal determinado tipo de movimiento en alguna parte del cerebro” (Sir Isaac Newton, 1670-1672), esto lo respalda con sus experimentos prismáticos, en los cuales se incluyen reacciones químicas y físicas, las cuales explican el surgimiento del color mediante la modificación de la luz; en su primer experimento separa un rayo de luz en un prisma, hasta descomponer el rayo en diferentes  refracciones en las que se distinguían los colores, a partir de esto el intenta explicar la naturaleza de los colores en los objetos, las cuales están basadas en la colisión de partículas de luz con las partículas del objeto, siendo así una reacción entre la retina del ojo, la cual capta el pulso oblicuo de la luz, las cuales dependiendo de su intensidad generan cierto tipo de color. Esta propuesta abre otras investigaciones en científicos los cuales ya explican que la luz son ondas luminosas como un tipo de energía electromagnética, la cual capta el ojo humano y que estas ondas tienen vibraciones las cuales permiten saber que longitud de onda tienen y a que color corresponde. Las ondas luminosas son en sí incoloras. El color nace únicamente en nuestro ojo o en nuestro cerebro, algo está todavía sin explicar, es saber esa relación entre el ojo y su reacción a las longitudes de luz.

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