El Niño Preescolar Y La Ciencia

UNIDAD II

ACTITUDES CIENTIFICAS

“EL ENCANTO DEL CARACOL”

JOANNE RYDES

En si pues el encanto del caracol nos da las características de un caracol ¿La sensación respecto a este animales agradable o no? El lector se imagina, a través de este libro, lo que es ser un caracol y cómo se viven en la tierra en esta lectura el niño hecha andar su imaginación sobre cómo será el caracol como vive, que come, como se desliza si tiene ojos, boca, que come, como se mete a su concha etc., es una historia que a los niños les encanta mucho pues hacen volar su imaginación y sobre todo sus dudas es por eso que uno como educador debe tener un amplio conocimiento del tema para despejarle sus dudas del niño.

Este es un ejemplo de cómo enseñar al niño de que es un caracol

A: Voluntad

EL DESARROLLO DE LA VOLUNTAD

La edad preescolar, la voluntad surge en el niño como un control consciente de su conducta, de sus acciones externas e internas. El control consciente del comportamiento solo comienza a formarse en la edad preescolar. A esta edad las acciones volitivas coexisten con las acciones con las acciones impremeditadas, impulsivas, que son resultado de sentimientos o deseos situacionales.

En la edad preescolar menor, la conducta del niño está constituida casi totalmente por actitudes impulsivas.

En la edad preescolar mediana el número de estas manifestaciones aumenta, aunque no llegan a ocupar un lugar considerable en la conducta.

Solo a la edad preescolar mayor el niño es capaz de realizar esfuerzos volitivos relativamente prolongados, aunque en este sentido está muy por debajo del niño escolar.

El desarrollo de la voluntad del niño está estrechamente relacionado con el cambio de las motivaciones de la conducta con la jerarquización de las motivaciones, se produce en la edad preescolar.

TENDENCIAS DEL DESARROLLO DE LAS ACTIVIDADES VOLITIVAS

Se desarrollan en base a tres aspectos mutuamente relacionados:

Constancia con el logro del objetivo. Surge ya en la primera edad, y se manifiesta, más en la fijación del objetivo que en su logro, las circunstancias externas desvían con demasiada frecuencia al niño, que renuncia al objetivo o transforma el propósito inicial.

Relación entre el objetivo de las operaciones y su motivación. El objetivo y la motivación coinciden. Pueden darse dos casos: en uno la motivación mediata, por la cual se realiza la operación, coincide con la motivación ligada al objetivo, es decir, al niño le interesa la propia operación y su resultado; en el segundo, mucho más difícil, el niño si quiere unos resultados atractivos más o menos mediatos, tiene que realizar una acción inmediata poco atractiva para el esta dificultad se supera con la fuerza de voluntad.

La voluntad del niño pasa por una prueba especial en una situación en la que chocan dos motivaciones opuestas. Por lo general el niños e deja llevar por el incentivo más fuerte.

En este caso el niño preescolar elige lo que no tiene y quisiera tener, pero el niño preescolar se comporta de una forma tan razonable solo en los casos mas simples, cuando tiene que elegir entre deseos homogéneos.

Las posibilidades de tomar una decisión razonable crecen cerca de la edad preescolar mayor: estas posibilidades se apoyan en la jerarquización de las motivaciones.

El creciente papel regulador del lenguaje en el cumplimiento de las acciones. Las operaciones volitivas se planean y regulan por medio del lenguaje.

El preescolar comprende bien el lenguaje, pero no es capaz de realizar operaciones complejas mediante instrucciones verbales.

Para el niño de edad preescolar mediana las indicaciones verbales del adulto son más duraderas. A esta edad el niño generalmente regula sus acciones en voz alta.

El preescolar mayor aprende a darse instrucciones verbales complejas, aunque ya no suele hacerlo en voz alta, pero en casos difíciles cuando tiene que reprimir deseos muy fuertes se orienta en voz alta.

SURGIMIENTO DEL INTERES POR EL ESTUDIO

La particularidad esencial del aprendizaje es que tiene por objetivo adquirir nuevos conocimientos y hábitos, no lograr un resultado externo. Enseñar al niño los elementos que constituyen la actividad escolar significa despertar en el interés por conocer y prepararle para aprender.

Ese creciente interés del preescolar se manifiesta sobre todo en que hace más preguntas y de un tipo distinto. Solo una pequeña parte de las preguntas del niño de tres o cuatro años persiguen el propósito de obtener nuevos conocimientos, de aclarar lo desconocido. Pero la mayoría de las preguntas del preescolar mayor revelan ya un deseo de comprender las causas que originan los diferentes fenómenos y su relación mutua. Pero la curiosidad por un fenómeno desaparece pronto.

Generalmente los intereses estables por el aprendizaje surgen solo al final de la edad preescolar y cuando el estudio está bien organizado.

El interés estable y discriminado por aprender anima al niño a adquirir nuevos conocimientos. Saber estudiar significa comprender que las tareas escolares son distintas a las situaciones prácticas. En la edad preescolar menor y mediana el niño acepta una tarea del tipo escolar solo si puede aplicar inmediatamente los conocimientos obtenidos al juego, dibujo u otra actividad.

En la edad preescolar mayor, mediante una enseñanza especial organizada, el niño admite la tarea de estudios aun si puede aplicar o no de inmediato lo aprendido. El niño va adquiriendo capacidad para aceptar esas tareas.

La autora se basa en los estudios, para remarcar la función semiótica de la imaginación y su vínculo con el juego, esto es que el niño desarrolle su inteligencia con imaginativa con el apoyo de juegos, dibujos, juegos y pase de una imaginación involuntaria a una imaginación intencionada, para que pueda esta ayudar a la regulación verbal del niño.

B: Imaginación

DESARROLLO DE LA IMAGINACION

La imaginación del niño se desarrolla en el juego. En una primera etapa es inseparable de las acciones lúdicas. En el juego los niños de tres y cuatro años tiene una importancia esencial la similitud entre el objeto sustituto y el sustituido. El niño algo mayor ya es capaz de desatar su imaginación utilizando como soportes objetos que en nada se parecen a los sustituidos.

El juego también puede transcurrir sin ninguna acción exterior, ser pura imaginación. La imaginación se forma en el juego y se traslada a otras actividades del niño preescolar, principalmente al dibujo y a la composición

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