El envejecimiento sano como un derecho de la salud pública

El envejecimiento sano como un derecho a la salud pública

 Autor: Flor Murillo Rodríguez

Resumen

El siguiente artículo tiene como objeto dar una visión sobre el significado de envejecer sanamente como un derecho a la salud y con un enfoque de salud pública; entendida como la disciplina que se encarga de proteger y mejorar el estado de salud de una población. Para ello el Ministerio de Salud ha concebido la estrategia maestra que reza; “Avanzar de la atención de la enfermedad hacia la promoción de la salud, posicionando la salud como valor social y dirigiendo y conduciendo las intervenciones de los actores sociales hacia la vigilancia y el control de los determinantes de la salud, basados en evidencia y con equidad.” (Modelo conceptual y Estratégico, 2010).  El Derecho a la Salud concebido desde la Constitución y entendido como el derecho a la vida, supone la vida misma, la integridad física y la salud. Sin embargo, la sala Constitucional defiende este derecho muy especialmente desde la prestación de servicios de salud y es por ello que he seleccionado este artículo a fin de exponer otras aristas, que deben llevarnos a obtener un envejecimiento sano como un derecho o principio fundamental.  

Abstrac  

The following article aims to give an insight into the meaning of healthy aging as an approach to the right to health and a public; understood as the discipline that is responsible for protecting and improving the health status of a population. The Ministry of Health has designed the master strategy that says; "Advance from the treatment of disease, to health promotion, positioning health as a social value and directing and conducting interventions of social actors to the surveillance and control of the determinants of health based on evidence and with equity." (Conceptual and Strategic Model, 2010). The Right to Health conceived from the Constitution and understood as the right to life, includes life itself, physical integrity and health. Even so, the Constitutional Court defends this right especially since the provision of health services and that is why I selected this article to expose other sides, which should lead us to get healthy aging as a fundamental right.

Palabras claves

Constitución- desigualdades-Envejecimiento saludable- Sector Salud-Ministerio de Salud- Caja Costarricense del Seguro Social.

Justificación

De acuerdo al informe GLOBAL SOBRE EL ENVEJECIMIENTO Y LA SALUD EMITIDO POR LA Organización Mundial de la Salud en setiembre del 2015,” Las poblaciones de todo el mundo están envejeciendo rápidamente. Entre 2000 y 2050, la proporción de la población mundial de 60 años y más se duplicará, del 11% al 22%. Se prevé que el número absoluto de personas de 60 años o más aumentará de 900 millones en 2015, a 1400 millones para 2030 y a 2100 millones para 2050, y podría llegar a 3200 millones en 2100. En 2050, las personas de 60 años o más representarán un 34% de la población de Europa, un 25% de América Latina y el Caribe y Asia, y aunque África tiene la estructura demográfica más joven entre todas las regiones principales, en términos absolutos el número de personas de 60 años o más aumentará de 46 millones en 2015 a 147 millones en 2050”. 

En el caso de Costa Rica el cambio en la estructura poblacional también tendrá esquemas distintos donde la misma ha tenido cambios como los que se muestran en la pirámide elaborada por el Instituto de estadísticas y Censos (INEC) 2013;

Estructura Poblacional 2015-2025

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Nota Fuente: MIDEPLAN. (2015) Plan Nacional de Desarrollo “Alberto Cañas”. San José: MIDEPLAN.

Con base en estos datos pasamos de tener 15,3 nacimientos por cada 1000 habitantes a 12,7. Esto implica una tasa de disminución del 17%, además la tasa de mortalidad, a 4,4 muertes por cada mil habitantes a una tasa proyectada de 5,0 y se prevé que la esperanza de vida al nacer sea cada vez mayor, pasando de un promedio cercano a los 80 años (2015) a un más de 81 años (2025). Esto indica que la razón de dependencia va a crecer de forma diferente; si es para menores de 15 años (tasa de crecimiento de 5%) en comparación con las personas de 65 años y más (tasa de crecimiento de 49%).

-si observamos las siguientes proyecciones en cuanto a la estructura de la población para los años 2015 al 2045 se desprende los siguientes datos;

Estructura Poblacional 2015-2025

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Nota Fuente: MIDEPLAN. (2015) Plan Nacional de Desarrollo “Alberto Cañas”. San José: MIDEPLAN.

De continuar con estos efectos, el país debe prepararse para un envejecimiento poblacional más marcado a partir del 2035. Se espera que la mayor parte de la población se encuentre entre las edades de 35 a 49 años, mientras que al 2045 el mayor porcentaje, podría estar en las edades de 45 a 59, y el número de personas con edades de 75 a más, ya serían un grupo bien notorio en la estructura de la pirámide población.

Se espera entonces que la población de 15 a 64 años vaya en descenso, al igual que la población menor de 15 años, mientras que la población de 65 años y más pasa de ser aproximadamente 15% en 2035 a 18% en 2045.

Estos datos reflejan una clara disminución de la población joven y que tendremos etapas para los años venideros donde no solo nuestro país experimentará estos efectos sino también muchas otras naciones más. Por esta razón en mayo de este año se discutió en la Asamblea Mundial de Salud el tema partiendo de las siguientes premisas: “Esos años adicionales de vida y esa remodelación de la sociedad tiene profundas repercusiones para cada uno de nosotros, así como para las comunidades en que vivimos. A diferencia de la mayoría de los cambios que experimentará la sociedad en los próximos 50 años, esas tendencias son, en gran medida, previsibles. Sabemos que la transición demográfica hacia poblaciones de más edad ocurrirá, y podemos planificarla para aprovecharla al máximo”.

Ante éste escenario Costa Rica debe contener una visión en donde no debe ser mirada como un problema, sino un privilegio ya que seremos una población longeva, pero sí se requiere de prepararnos ya que las repercusiones se establecerán en el aumento al acceso en los servicios de salud y los programas sociales, ya que estos cambios en la estructura demográfica también implican diferencias en los aspectos económicos, culturales y ambientales.

Además, los datos expuestos reflejan que distintas generaciones viviremos en iguales proporciones y se debe de considerar que es la intregeneracionalidad la que procurará el éxito en la convivencia. La OMS (2016) dice “El hecho de que se viva más ofrece la oportunidad de reconsiderar no solo lo que podría ser la edad avanzada, sino de qué manera podría evolucionar nuestro ciclo de vida. Ahora bien, la medida en que cada uno de nosotros como personas y la sociedad en su conjunto se pueden beneficiar de esa transición demográfica dependerá considerablemente de un factor determinante: la salud. Lamentablemente, aunque se suele suponer que el aumento de la longevidad conlleva un periodo prolongado de buena salud, existen pocos datos que sugieran que en la actualidad las personas mayores gozan de mejor salud que sus padres a la misma edad. Además, la buena salud en la edad avanzada no está equitativamente distribuida en los países ni entre ellos”. 

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