El ámbar

Naturaleza

Universidad Nacional Experimental Francisco De Miranda

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El ámbar

El ámbar es una resina fósil de los antiguos arboles de coníferas extintas, conservados en los sedimentos arenosos costeros que destacan su pureza, su claridad y su color vibrante. Fue la primera gema semipreciosa apreciada por los humanos. El ámbar data de la era prehistórica, amuletos de ámbar han sido encontrados con fechas de 15.000 y 10.000 años AC, cuando se pensaba, tenía poderes mágicos, y era utilizada como adorno y como medio de trueque. Pliny (1 DC) en su libro de Historia Natural, presentó evidencia de que el ámbar era el desecho de un árbol parecido a un pino, y aún más, que se originaba en el norte y que contenía comúnmente pequeños insectos. Las cualidades preservativas de la resina de las plantas, incluyendo el ámbar, eran conocidas por los antiguos. Los egipcios solían usar resinas para embalsamar a sus muertos y los griegos las usaban para preservar vinos. Estas resinas también preservaban, frecuentemente en un remarcable estado, todo tipo de organismos que hicieran contacto con la pegajosa sustancia.

El ámbar más común es el ámbar del Báltico, le sigue el de Ucrania y el de la costa del Mar del Norte. El resto de resinas fósiles de otros se encuentran en diferentes yacimientos alrededor del mundo, donde destacan varios países (Rusia, Groenlandia, Gran Bretaña, España, Francia, Polonia, Alemania, Letonia, Lituania, México, Brasil, Republica Dominicana, Nicaragua, Colombia) El mayor yacimiento de ámbar se encuentra en Rusia, la región de Kaliningrado. El tipo de pino, cuya resina dio lugar al ámbar del báltico, se llama en Latín el ”Pinus suctsinifera”, por tal razón el ámbar se llamaba succinite. El color más habitual del ámbar es el amarillo, amarillo claro, anaranjado y pardo, y también en ocasiones rojizo, rojo, negro, verdoso, azulado (muy raro) y blancuzco lechoso. El color depende del árbol productor de la resina, de la presencia de ciertos minerales y de la alteración de sustancias orgánicas por oxidaciones. Su dureza es baja, presenta fractura concoidea y es quebradizo. Su peso específico es bajo por lo que flota en el agua salada. Es insoluble en el agua y casi insoluble en disolventes orgánicos. Es mal conductor del calor, se funde entre 250 y 300 ºC y se descompone con emisión de humos blancos y fuerte olor a resina de pino. Arde con llama amarillenta y chisporrotea.

La resina se endurece primero por la pérdida gradual de componentes volátiles, tales como alcohol y grasa, para convertirse en Copal, resina del mismo origen que el Ámbar cuyas características físicas y ópticas no difieren mucho de las de éste excepto que debido a su menor compactación, afecta su densidad, dureza y su susceptibilidad a la disolución frente a disolventes orgánicos y  la cual posteriormente sufre una perdida mayor de estos componentes durante su enterramiento en los sedimentos para convertirse en ámbar En general, las resinas que se fosilizan para convertirse en ámbar proceden de árboles de las familias Araucariaceae (araucarias) y Fabaceae (leguminosas).

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