Enfermedad del Alzheimer.

ALZHEIMER

Alteraciones funcionales

En los primeros años de esta enfermedad no se manifiestan alteraciones importantes de tipo funcional, pero inician los problemas de ubicación y gracias a esto se dificultan actividades como salir solos a la calle, lo cual afecta demasiado su salud física y la manera de relacionarse socialmente. Una caracteriza de las personas que sufren la enfermedad de Alzheimer es el sedentarismo que acelera el deterioro físico y el de su calidad de vida.

Cuando la enfermedad está en un nivel alto, entre 3 y 5 años, se ven nuevos inconvenientes como la dificultad con el lenguaje que se torna menos fluido, se desgasta el entendimiento y el raciocinio abstracto, entre otros. Se hace cada vez más necesaria la asistencia de un tercero al ejecutar acciones cotidianas y físicamente se hacen muy notables perturbaciones como: “Atrofia y debilidad muscular; Rigidez articular con disminución de la movilidad; Alteraciones del equilibrio y la coordinación; Alteraciones de la marcha y alteraciones del control postural…; Dolor al inicio del movimiento y fatiga al esfuerzo”.

En el momento en el cual la enfermedad está más avanzada, se agravan los signos neurológicos, que se ven endurecidos, con mas hiperreflexia y espasticidad, también se manifiestan reflejos primitivos. El desorden del movimiento genera que los desplomes y roturas sean habituales, la locomoción se torna insegura y surge intranquilidad motriz. En este punto es muy posible denotar falencias en el dominio del torso que conlleva muchas otras dolencias más, en especial perdida de estabilidad y equilibrio, agrava el tema de la rigidez en articulaciones y desproporciones. Todas estas molestias generan aun mas fatiga al impulso y aflicción al comenzar los movimientos, es posible relacionarlo con contratiempos circulatorios.

Lo anterior se interpreta en una gran pérdida de autonomía precisando gran auxilio para circular, de igual manera que para la gran parte de las acciones de la vida cotidiana; algunas veces se puede requerir la costumbre de medidas de contención para un más beneficioso manejo postural o elusión de algún desliz.

Todos los casos son distintos y no siempre el que padece esta alteración llega a su fase más grave, todo depende de las atenciones recibidas, el desarrollo de la dolencia, las otras enfermedades que surjan, entre otros; factores que determinaran el estado y si se llega a un síndrome serio o leve.

Alteraciones cognitivas

Los indicios neurológicos se pueden observar en diferentes campos y múltiples niveles de peligro, según la etapa progresiva y en función de cada proceso.

En la mayoría de los casos se ve perjudicado aspectos como la retentiva, la orientación, el habla, las capacidades ejecutivas (pensamiento abstracto, capacidad de razonamiento, etc.), las gnosis (capacidad para reconocer o identificar objetos, aunque las funciones sensoriales estén conservadas), las praxis (capacidad para realizar actividades motoras, aunque las funciones motoras estén conservadas), entre otros.

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