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Juan Darién

Juan Darién, cuento elaborado por Horacio Quiroga, cuentista, dramaturgo y poeta uruguayo, nacido el 31 de diciembre de 1878 fue el maestro del cuento latinoamericano, de prosa vívida, naturalista y modernista. Sus relatos breves, que a menudo trataban de naturaleza bajo rasgos temibles y horrorosos, y como enemiga del ser humano, le valieron ser comparado con el estadounidense Edgar Allan Poe.

Nos relata la historia de un pequeño tigre que se convierte en hombre, un hombre de buenos sentimientos, sin odio, de unos muy buenos sentimientos pero algo tímido. Se convirtió en hombre gracias a una mujer que le dio de amamantar cuando el pobre tigre estaba solo y tenía posibilidades de morir ante las manos del hombre. Una serpiente le dijo que en ese momento el tigrillo adoptaría la forma humana y que él no sabría su origen hasta que su madre no le exigiera con su sangre lo que ella había dado por ese cachorro.

Así pasaron los años y la madre falleció dejando a Juan Darién solo, todo el pueblo ignoraba al pobre niño sin alguna razón. Un día un inspector visitó la escuela del pueblo y noto algo peculiar a Juan Darién, así que puso a todos los niños a describir que era el bosque, todos describían exactamente lo mismo, Juan Darién hizo exactamente lo mismo pero el inspector insistió en que pensara más, y el efecto que tuvo esto fue que recordara acerca de su vida de fiera, al momento que conto lo que veía el inspector se impactó pero conservo la calma. Más tarde el inspector se reunió con los habitantes del pueblo diciendo que Juan Darién debería morir ya que era un tigre en el cuerpo de un hombre y que podría matar a todos.

El pueblo enfurecido llama a un domador de fieras, el cual fue hasta la casa del niño y Juan Darién fue martirizado por el hombre, arrojando al niño a unos perros, los cuales no le hicieran ningún daño, fue apedreado le dieron latigazos, lo iban a sacar del pueblo hasta que se acercó a una mujer que creyó que mataría a su pequeño hijo, fue ahí cuando la profecía se cumplió, la mujer dijo que lo quemaran, todo el pueblo lo arrastro y lo amarraron en el castillo de los fuegos artificiales, el fuego empezó el pequeño niño gritaba por su vida, hasta que el cuerpo de hombre desapareció y apareció un tigre que rugió y cayó al suelo dándose un fuerte golpe , el pueblo lo saco.

Para sorpresa no murió se refugió, se curó las heridas en los más interno del bosque, busco al domador y lo llevó con todo el grupo de tigres y exclamo que era el renacimiento del tigre, subió a lo más alto del bosque junto con el domador y lo amarro en dos bambúes y encendió las hojas secas, dándole el mismo final de Juan Darién al domador, este pidió perdón a Juan Darién pero el negó su nombre pues esto era lo único que le unía a su pasado.

En la tumba de su madre oró y con su sangre de la herida que aún no sanaba escribió Juan Darién,

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