Estudios previos demuestran que una aculturación al estilo de los Estados Unidos, aumenta el riesgo de obesidad en niños latinos.

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Estudios previos demuestran que una aculturación al estilo de los Estados Unidos, aumenta el riesgo de obesidad en niños latinos.

En este estudio se demuestra que las prácticas de aculturación procesos en procesos alimenticios y el estilo de vida impactan entre los grupos latinos.

Los estudios en adultos y adolescentes muestran que la segunda generación de latinos y los que tienen mayor tiempo de residencia en los Estados Unidos son más propensos a ser obesos en comparación con la primera generación de latinos, principalmente debido a los hábitos alimentarios pobres y ha disminuido los niveles de actividad física en comparación con los latinos en sus países de origen. En estudios con niños, la relación entre la aculturación y la obesidad ha sido inconsistente.

En un estudio de niños en edad escolar matriculados en los grados K-2 ° en San Diego, los hijos de padres que eran menos aculturados, eran más propensos a ser sobrepeso. Del mismo modo un estudio que comparó el riesgo de obesidad entre los niños nacidos en EE.UU. en comparación con las madres de origen mexicano nacidos en el extranjero se halló un aumento del riesgo en los hijos de madres nacidas de Estados Unidos. Sin embargo, un estudio de evaluación de los factores de riesgo para el niño con sobrepeso en los niños mexicano-americanos en Chicago no encontramos ninguna diferencia en el riesgo asociado con la aculturación, definida como el lenguaje y el uso de los medios y las relaciones sociales. Algunas de estas diferencias observadas pueden ser explicadas por las variaciones, definiciones y medidas de aculturación.

Se evaluaron los factores de riesgo para la obesidad en un grupo diverso de niños en edad escolar latinos en el área de San Francisco, con un enfoque particular en la relación entre la aculturación, el uso de medidas basadas en el lenguaje de la aculturación, las diferencias étnicas y prácticas alimentarias. Específicamente, este estudio, a diferencia de los estudios anteriores, se centra en la posibilidad de que puede haber heterogeneidad de los grupos latinos.

La variable dependiente de interés importante fue la obesidad infantil. La principal variable independiente fue el estado de aculturación basado en los niños y la casa de los padres de nacimiento, el uso del español hablado en comparación con Inglés en el hogar o en la escuela, y viendo la televisión en español en comparación con Inglés.

Este es el primer estudio para evaluar la relación entre la etnicidad y la aculturación en la determinación de riesgo de la obesidad en los niños latinos. En contraste con algunos otros estudios, encontramos que la disminución de la aculturación (medida por el uso del idioma español en casa) se asoció con un mayor riesgo de obesidad.

También se encontró que el consumo de tortas, un sándwich de comida rápida mexicana servida dentro de un pan blanco crujiente 6-8 pulgadas, se asoció con un menor riesgo de obesidad. Las tortas comúnmente se llenaron con jamón, pollo, pavo, carne o carne de res. Tanto para los niños de origen mexicano y centroamericano, el consumo regular de desayuno se asoció con un menor riesgo.

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