Ingenieria humanitaria

Caso de estudio 1

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1. No, porque cuando uno quiere ayudar es porque se quiere, no para llamar la atención. Se hace y no se muestra. Todo esto muestra lo narcisista y la falta de altruismo de esa persona. Cuando una persona quiere conquistar, la mayoría de los que ven la publicación se molestan, ya que muestran que son presumidas, especialmente si lo que presumen es el hecho de supuestamente ayudar a una comunidad, cuando es evidente que no es así.

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1. Ganan las personas que se toman las fotos para subirlas a la aplicación, las poblaciones vulnerables que salen en las fotos son olvidadas después de la publicación, así que no reciben ningún beneficio. Las personas que toman las fotos ganan fama y “likes” en sus respectivas cuentas. Se vuelven más conocidos a costa de mostrar la desigualdad social.

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1. La tecnología da la facilidad de hacer esas fotos públicas y virales de manera rápida. Si no hubiera un público realizando esa demanda de contenido no habría necesidad de publicarlas. Si nadie está interesado en dar “me gusta” a una publicación de este estilo, no se harían virales de la forma en que lo hacen.

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1. El simple hecho de poder ir a esas comunidades solo a vacacionar y el hecho de no ser parte de esas comunidades de bajos recursos, ya es un privilegio. En las mismas fotos se ve la desigualdad, esas mismas personas quieren hacer notar la diferencia, tanto de condición social como la diferencia de color de piel y de estilo de vida.

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1. Crear una aplicación para personas que realmente ayudan a las comunidades. Donde se pueda ingresar y por cada persona, se puedan ver sus proyectos y lo que realmente hacen por las comunidades. Una aplicación donde se pueda apoyar a la causa contribuyendo o siendo partícipe. Si se ve en Tinder una publicación con este tipo de fotos, se puede comprobar en nuestra aplicación si esa persona realmente está involucrada en un proyecto de ayuda o si solo está alardeando al respecto.

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