La Protección De Las Obtenciones Vegetales, Los Derechos De Obtentor Y Los Recursos Genéticos

Esbozando un poco de historia sobre el inicio de la protección de las obtenciones vegetales, se evidencia ya a finales del siglo XIX la aparición de las originales asociaciones de obtentores con la cuales se inician las negociaciones con miras a la posibilidad de otorgar algún tipo de protección a las obtenciones vegetales. Por su parte Estados Unidos para 1930 aprobó la primera Ley de Patentes Vegetales del mundo, la cual cubría únicamente las variedades de reproducción asexuada, y más adelante, para el año 1970 incluye las plantas con reproducción sexual en la esfera de la patentabilidad.

Sin quedarse atrás, los obtentores europeos conciernen en la necesidad de implementar un sistema más amplio de protección, es así como entra en vigencia en el año 1968 la UPOV - Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales-. La naciente legislación es enmendada varias veces, pues no se ajusta al desarrollo de la biotecnología en el campo de la agricultura. Casi dos décadas después, hacia los años ochenta, los países miembros de la UPOV concibieron la necesidad de realizar nuevamente un examen del tratado para fortalecer y ampliar los derechos de obtentor, pues el sector así lo demandada teniendo en cuenta la vertiginosidad del crecimiento en los costos del trabajo filogenético.

Estas primeras enderezas se limitaban a reformas de forma y no incluían modificaciones sustanciales. Es hacia el año 1991 cuando surge una modificación importante, específicamente en relación a la reutilización de las semillas, aspecto que conllevó a resultados efectivos y ventajas visibles en especial para los países en desarrollo como Colombia y Argentina .

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