La empresa ofrece productos de calidad y cuenta con innovación tecnológica para la producción y la realización de diagnósticos microbiológicos, nutricionales y sensoriales de sus productos.

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UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL MAULE

Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales

Escuela de Agronomía

SALIDA A TERRENO: PF

FRANCISCA CATALINA IBARRA RUBIO

Los Niches, Curicó, Chile

18 de abril de 2017

Introducción

        Productos Fernández (PF) es una empresa productora de alimentos, los cuales son jamones, arrollados, productos cárnicos, empanizados, pizzas, entre otros. Las plantas industriales se ubican en la ciudad de Talca, las que suman más de 50.000 metros cuadrados en donde trabajan más de 1500 personas.

        La empresa ofrece productos de calidad y cuenta con innovación tecnológica para la producción y la realización de diagnósticos microbiológicos, nutricionales y sensoriales de sus productos.

        Poseen una alta gama de alimentos, ya que busca satisfacer las necesidades y cambios de los consumidores, como por ejemplo: hoy en día muchas personas han cambiado sus hábitos alimenticios (vegetarianos), o aquellas personas que buscan opciones rápidas y prácticas de comida (platos preparados).

Desarrollo

        El proceso productivo que posee la planta de jamones y arrollados comienza con la recepción de insumos y materias primas, las que son de origen nacional e internacional (Brasil, Canadá y Estados Unidos), estas son almacenadas en cámaras de frío hasta el momento que serán ocupadas.

        Existen dos líneas de producción, en la primera de ellas se preparan productos molidos y/o picados, mientras que en la segunda se realizan productos de músculo entero, en ambas líneas de producción se seleccionan y se pesan las materia primas a ocupar de acuerdo a la receta a realizar.

        Mientras tanto, en la sala de dosimetría, se dosifican y disuelven los aditivos, formando una salmuera, la que se inyecta a los músculos de carne de la segunda línea de producción, posteriormente, los músculos pasan a una máquina que realiza cortes superficiales para así tener una mayor superficie de contacto. Luego de esto, los músculos pasan a un reactor cilíndrico que masajea la carne, con el objetivo de extraer la proteína y unir la salmuera con los músculos.

        Terminado el proceso de masaje, las carnes son llevadas hacia cámaras donde reposan entre 6 y 72 horas dependiendo del producto que se fabricará, a continuación pasan a las líneas de embutido, una de ellas (la principal), posee una embutidora automática, la cual porciona la cantidad de cada unidad para luego pasar a un detector de metales. El producto es embutido en una tripa plástica resistente a altas temperaturas. Otra de las líneas de embutido es la de jamones acaramelados, la que los arma artesanalmente con una lámina de colágeno y una malla elástica. Existe otra línea, la cual envuelve los arrollados en láminas de tocino o cuero, dependiendo de la receta.

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