La migración de la mariposa monarca

La migración de la mariposa monarca

La migración de la mariposa monarca es una de las migraciones más grandes del planeta. Al final del verano de cada año, millones de monarcas de la América del Norte vuelan hacia el sur, donde el invierno es menos frío.

El viaje es largo y lleno de peligros, especialmente para la población de monarcas que vuela 4,000 kilómetros (3,000 millas) a su casa de invierno en la parte central de México. ¡Este animal pequeño tiene unos pocos centímetros de largo! Las monarcas valientes vuelan sobre montañas, desiertos y algunas veces sobre ciudades.

Sólo volando estas grandes distancias la monarca puede tener lo mejor de dos mundos. Uno, en los Estados Unidos y Canadá. Allí existe abundante algodoncillo y flores para alimentarse en muchos de los campos en que ellas viven en el verano. El segundo, en los bosques de abeto en las montañas de Michoacán, México en que ellas viven en el invierno.

Ellas llegan a Michoacán en noviembre. La llegada de las monarcas generalmente coincide con el Día de los Muertos, cuando los mexicanos honran los muertos de sus familias. De acuerdo con la leyenda azteca, las mariposas representan las almas de los muertos.

Para una mariposa en Mexico, el bosque es su casa. Los altos árboles de abeto proveen el techo que las monarcas necesitan para protegerse del viento y de la lluvia. Hay varios santuarios y cuando llega el sol las mariposas se calientan y millones de mariposas vuelan en el bosque. Cuando hay nubes o por la noche, las mariposas se juntan en grupos en forma de racimo en los árboles de abetos.

Pero hay un problema con los bosques. El problema es que las personas, también, necesitan los árboles. Cortan los árboles para vender la madera y necesitan el dinero. Desafortunadamente, ellos están cortando muchos árboles y el bosque tiene ahora espacios que dejan pasar el viento, la lluvia y, a veces, la nieve. En el año 2002 hubo una fuerte nevada y millones de monarcas murieron. Esta expereincia nos enseña una lección importante: “Un techo con agujeros no es un techo”.

Tenemos que ayudar. Tenemos que hacer algo para proteger la monarca y los bosques de Michoacán. Una cosa que podemos hacer en México es trabajar con las comunidades cercanas en Michoacán para ayudarles a encontrar otros modos de ganar dinero sin tener que cortar los árboles donde las monarcas hibernan.

Si vives en los Estados Unidos, puedes visitar el sitio de Internet www.learner.org/jnorth/spring2001/species/monarch. En este sitio puedes seguir la miración desde Norte América hacia el sur durante el otoño y hacia el norte durante la primavera. Tambien puedes aprender de los muchos proyectos que puedes realizar en tu escuela.

Necesitamos proteger este fenómeno natural y apreciar estas mágicas criaturas.

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