La pena de muerte será la muerte

        Luis Carlos Velasco Valencia

       Código: 1529579

La pena de muerte será la muerte

Actualmente Colombia está viviendo mucha inconformidad por los crímenes que no son muy bien juzgados.  Dicho de otro modo, que la justicia no le da el castigo necesario a aquellas personas que hayan cometido un abuso contra los derechos humanos,  como asesinatos, secuestros, violaciones entre otros,  y esto ha ocasionado que unos pocos colombianos que se han visto afectados exijan devuelta el antiguo sistema penitenciario denominado “La ley del miedo”. Pero esto no hace que el resto de la nación este a favor de la legalización, por lo tanto esta no debería de legalizarse, ya que si se adopta esta ley a nuestra constitución se estaría yendo en contra del derecho fundamental de las personas (derecho a la vida). ¿Cree usted que con la legalización de la pena de muerte en Colombia, no se construiría un mejor país para nuestros niños? .Pensando en unas nuevas generaciones ¿cuál cree usted que sería la mejor solución, si se dice que inicialmente la pena de muerte no funciona como prevención general de delitos? Si piensa en una Colombia pacifica se puede decir que la pena de muerte es un acto inmoral contra la sociedad y siendo inconstitucional no se

ha de legalizar,  porque así afectaría el ordenamiento de un país, habiendo así

mucha fragilidad en la estructura de un estado.

“La vida humana tiene un carácter sagrado e intocable, en el que se refleja la inviolabilidad misma del Creador. Precisamente por esto, Dios se hace juez severo de toda violación del mandamiento "no matarás", que está en la base de la convivencia social”. (Evangelio de la Vida, Capítulo III n.52-56).

La iglesia católica piensa que en vez de  sentenciar a muerte a una persona es mejor “educarla”, ya que piensan que DIOS es el único dueño de la vida, y dicen que él no quiere la muerte del pecador si no que cambie de conducta y viva. Religiosamente esta pena se podría ver como un castigo absurdo por que no se ha demostrado que disminuya la delincuencia y tampoco que intimide a unos próximos agresores.

 “Un individuo que mata a navajazos a cinco personas y luego hace picadillo a su mujer ¿qué puedes hacer con él?  Sólo existen dos soluciones: o que se suicide, o bien aplicarle la pena capital, que es una manera educada y elegante de invitarle a suicidarse. Sería  una atención que tiene la sociedad con el criminal” Bueno G. (2004). El Norte de Castilla, 24-1.

Ahora bien, la pena de muerte se sujeta en los pensamientos de muchas personas que han sido víctimas de violencia, y bien muchas de estas tienen argumentos con los cuales hacen validarse en distintas ocasiones, ya que sienten pánico por una fuga  o que el castigo penitenciario sea muy corto y vuelvan a reincidir en sus actos, puesto que opinan que sus mentalidades criminales no cambiarían con el castigo imputado y seguirán delinquiendo.

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