Las abejas

LAS ABEJAS

Las abejas son indispensables para la polinización de las plantas, son los agentes polinizadores más relevantes del ecosistema, es decir, su aporte principal para la tierra es lograr la fecundación y el desarrollo de frutos y semillas o frutos. Sin ese proceso, las plantas y los árboles dejarían de reproducirse, la polinización es un proceso fundamental que mantiene la vida sobre la tierra.

Se estima que son encargados de polinizar alrededor de 25.000 especies de plantas o flores.

Hay estudios que afirman que de todas las cosas que comemos entre un 75% u 80% tuvieron acción directa de las abejas.  Existen 100 especies de cultivos que proporcionan el 90% de los alimentos en todo el mundo, y 71 de ellos se polinizan con las abejas.  Es decir que sin abejas no existiría la polinización y sin la polinización no habría comida.

Además de estar encargados de todo el proceso de polinización, también nos brindan productos derivados como la miel, que es una importante fuente de energía y de vitaminas B, C, D y E, además de ser un endulzante natural.

El polen es otro derivado de las abejas, y es utilizado como complemento nutricional. También la jalea real y el veneno de abeja son productos originados en los panales, y son de mucha utilidad para el ser humano.

A pesar de ello, datos recientes informan de una amplia desaparición y exterminación de abejas, esto se debe al avance de la industrialización y el uso de tóxicos en cantidades masivas.

Una abeja debe visitar alrededor de 10 millones de flores para producir un kilo de miel, y si llegara a volar 800km en toda su vida solo produciría media cuchara de miel.

Si las abejas desaparecieran afectaría a un 85% de cultivos que dependen de la polinización y la comercialización de los mismo. La diversidad de alimentos se reduciría en gran manera, y podría acabar con la vida de 25.000 especies de plantas.

Además de las pérdidas en la producción de miel y otros productos apícolas, sin estos insectos la actividad agrícola prácticamente desaparecería, algo que afectaría a la economía mundial. El valor económico de la actividad que realizan las abejas es alrededor de un cuarto de billón de dólares al año, esto implicaría un costo enorme para el ser humano y aun mayor para los países de escasos recursos económicos.

Albert Einstein afirmó que, si las abejas desaparecieran de la faz de la Tierra, el ser humano no tardaría ni siquiera cuatro años en desaparecer. Ya que si las abejas se extinguieran mundialmente no podrán cumplir su función de polinizar, el equilibrio ecológico de los ecosistemas se vería afectado negativamente.

Todas las especies de animales que dependen de las plantas morirían. Significaría una extinción de especies animales y vegetales, ya que, sin la polinización, no podrían reproducirse.

Las abejas seguirán siendo imprescindibles para la polinización de cultivos y de las plantas silvestres, son un indicador de la salud medioambiental. Su salud y desarrollo dependen del cuidado que realicemos de nuestro entorno natural. Sólo con el desarrollo de una agricultura, una ganadería y una industria responsables con el medio ambiente podremos conseguir el cuidado de nuestro entorno natural y así obtener el equilibrio ecológico.

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