Microbios

Capítulo II

LOS MICROBIOS NACEN DE MICROBIOS

Un niño que realizaba experimentos con bichos, y que examinaba atentamente los seres vivos de la naturaleza, este joven italiano tuvo que sostener grandes luchas con su familia para poder llegar a ser un cazador de microbios.

Sus amigos lo llamaban “El astrologo” ya que pasaba gran tiempo viendo las estrellas, tratando de explicar el porqué de estas.

Un día tropezó con un libro que le mostro un procedimiento de cómo atacar la cuestión del origen de la vida, cuyo autor era Redi; Needham, con la pretensión de que el caldo de carnero engendraba animales microscopios dio cuenta de sus experimentos a la Real sociedad, Es un descubrimiento trascendental estos animales solo pueden proceder de la grasa del caldo y demuestra que la vida puede surgir espontáneamente de la materia muerta., pero Spallanzani decía que esto era falso y se esforzaba por demostrar lo contrario, pensaba ¿porque han aparecido esos animalillos en el caldo caliente? y concluyo que era porque Needham no calentó la botella el tiempo necesario y tampoco la cerro herméticamente y para esto realizo un experimento en el que calentó las sopas y las dejo hirviendo durante una hora, y fundió a la llama el cuello de algunos redomas cerrándolos con el mismo vidrio, y otros tapándolos con corcho, después de días observo que en los que cerró con el mismo vidrio no había ningún tipo de microorganismo y en los que tenían el corcho presentaban gran cantidad de estos, concluyendo que los animalitos que hay en el aire lograron colarse en los redomas mal tapadas y descubrió que los microorganismos pueden soportar la temperatura del agua hervida y seguir vivos y para matarlos hay que mantenerlos a esa temperatura durante una hora. Los microorganismos seguirán entrando siempre que se tape con corcho y seguirán desarrollándose una vez que el caldo se enfrié.

Pero para estar totalmente seguro de esto, el mismo Spallanzani volvió a tomar los redomas y las semillas, pero ahora poniéndolas en un tostador de café y las calentó hasta reducirlas a cenizas, destruyendo por completo la fuerza vegetativa y aun así encontró en todos ellos animalitos. La Fuerza vegetativa ahora solo era un mito.

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