Privacidad online versus off-line

Privacidad online versus off-line (Capítulo 5 página 147)

La privacidad online versus off-line siempre ha sido un debate con múltiples aristas. Desde mi punto de vista, la privacidad online representa un problema más importante que la privacidad offline pero los beneficios que propone tanto para las empresas como para los clientes bien vale la pena el riesgo.

Si bien es cierto, el uso de las tecnologías online  ha venido a facilitar buena parte de las tareas diarias en función del tiempo requerido (como realizar compras desde casa en cualquier lugar del mundo, pago de servicios públicos, obtención de documentación, búsquedas en bases de datos, entre algunos), con su crecimiento, también se han incrementado las necesidades de las empresas de formar bases de datos de sus clientes con información que se puede considerar cada vez más sensible, como los métodos de pago,  que anteriormente no se recolectaban pues no era necesario, ya que el cliente se presentaba directamente en el establecimiento y realizaba directamente el pago en efectivo, cheque o por cualquier otro medio y por tanto, la información que se requería por ejemplo para los análisis de marketing se obtenía por otros medios como encuestas.

Actualmente, dentro de las Compañías, estos datos que se recolectan de forma online se utilizan para analizar y estudiar tendencias, segmentos y necesidades específicas, pero también, las empresas se han visto en la necesidad de fortalecer sus sistemas de seguridad para evitar que esta información no sea extraída por algún hacker (o algún empleado de ética cuestionable), ya que su valor en el mercado negro, dependiendo del tipo de información extraída, puede ser muy alto en lugares como la Deep Web.

Sin embargo, la realidad es que la mayor parte de los datos que compartimos a las empresas están seguros, pero nosotros como usuarios, no estamos conscientes de cómo nuestros datos personales están expuestos en la internet ni la forma correcta de protegerlos, sino que confiamos ciegamente en quien le brindamos nuestra  información o datos, a mi criterio porque el rápido crecimiento de lo online no ha ido de la mano con la educación de los usuarios.

Con la privacidad offline, también existe el riesgo de robo de datos sensibles, pues siempre existirá un ente emisor de información, y si a eso le sumamos que no tiene los beneficios de la versión online como validación en línea, reducción del tiempo utilizado para realizar cualquier tarea, etc, pareciera, desde mi punto de vista que lo online prevalecerá sin importar los riesgos.

Siempre existirán opciones de mejorar la seguridad de lo que se mantiene online, mientras que en lo offline,  es poco lo que se puede mejorar; adicionalmente,  no brinda herramientas efectivas a las empresas para realizar análisis rápidos y masivos que sirvan para la toma de decisiones por lo que en conclusión,  la privacidad online vs online, si bien es cierto es un problema más grande desde el punto de vista de manejo masivo de información y su custodia, no deja de ser la mejor opción por todas las oportunidades que brinda.

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