“Quién debe a quién? Deuda ecológica y deuda externa” (2005)

“Quién debe a quién? Deuda ecológica y deuda externa” (2005)
Reseña del libro de Joan Martínez Alier y Arcadi Oliveres

Síntesis de la temática tratada en el libro

El libro “¿Quién debe a quién? Deuda ecológica y deuda externa”, escrito por Joan Martínez Alier (catedrático de Historia Económica) y Arcadi Oliveres (profesor de Economía Mundial) trata de forma clara la relación entre la deuda ecológica y la deuda externa y el origen y las consecuencias que provocan ambas deudas en los países menos desarrollados del planeta (los del Sur).

Exposición de las principales ideas del texto

Las principales ideas del libro son definir que son estos dos tipos de deudas explicando su origen, como se han intentado reducir y sus consecuencias. La deuda ecológica no es más que los costes que los países desarrollados nos ahorramos al continuar usando el espacio ambiental de todos (atmosfera y suelo terrestre) como si fuera propiedad de los propios países desarrollados, mientras que la deuda externa no es más que aquella deuda que los países del Sur han de pagar por las reformas económicas y por el uso de los recursos por parte de los países del Norte.

Esta deuda externa se ha originado por razones estructurales y coyunturales. En cuanto a las razón estructurales, que derivan del sistema económico y de la situación política y social de los países en vías de desarrollo, encontramos el comercio desigual entre los países del Tercer Mundo y los desarrollados (originado debido a la sobreoferta de productos primarios y a la aparición de sustitutos químicos de materias primas tradicionales, reflejando un precio menor de las exportaciones de los países no desarrollados frente a un incremento de los precios de las importaciones provenientes de los países desarrollados, generando más deuda debido al desequilibrio de la balanza comercial), los gastos nocivos provocados por la compra de bienes y de transferencias que no representan el bienestar general de la población (compra de armas, importación de productos de lujo, etc), la actuación de las compañías transnacionales cuyo establecimiento en un país provoca una salida de divisas y la política de créditos a la exportación (que se conceden desde los países desarrollados a los no desarrollados para que estos adquieran mercancías producidas en los países industrializados y que a veces se hacen con costes superiores a los del mercado internacional).

Otra causa del aumento de la deuda externa ha sido por razones coyunturales, derivadas de los créditos que han sido otorgados a los países no desarrollados y en la que han influido el comportamiento de los países deudores y la evolución de los mercados. En estas encontramos los créditos mal utilizados (otorgados a raíz de la independencia de muchos Estados, que estaban destinados a potenciar el desarrollo económico y que se caracterizaron por tener un bajo interés y largos periodos de amortización) y las renovaciones crediticias, que han resultado ser muy perjudiciales para las economías endeudadas por diversos motivos financieros y monetarios.

Una de las “soluciones” aportadas por los organismos internacionales fue la promoción de los llamados “Planes de Ajuste Estructural” (PAE). Los PAE, creados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), consisten en una serie de medidas económicas totalmente neoliberales que los países receptores de los PAE deben tomar para que estos sigan recibiendo créditos. Algunas de estas medidas, que en Europa nos parecen familiares, fueron privatizaciones de empresas públicas, la eliminación de ayudas sociales, bajada de salarios para reducir la inflación y la apertura al capital extranjero. Estos PAE provocaron un efecto contraproducente al reducir el poder adquisitivo de la población, la reducción de servicios que los Estados ofrecen, el encarecimiento de las importaciones al devaluar moneda y una liberación de mercado que no trajo mejoras generales, sino que únicamente favorecieron a las personas con más poder adquisitivo.

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