REQUERIMIENTOS NUTRICIONALES ADULTO MAYOR

REQUERIMIENTOS NUTRICIONALES ADULTO MAYOR

Los requerimientos de energía disminuyen con el envejecimiento, debido a una declinación en la tasa metabólica basal y una reducción en la actividad física, por lo que la FAO y la OMS recomiendan reducir el consumo diario de energía promedio en las personas adultas mayores. El envejecimiento produce cambios fisiológicos que modifican las necesidades de diversos minerales (calcio, zinc, hierro, ácido fólico). Un estado mineral deficiente en este grupo poblacional es atribuible a un bajo consumo. En la población mexicana, según Bourges y colaboradores el porcentaje del valor energético total son:

• Proteina: 12 al 15%

• Hidratos de carbono: 55 a 63%

• Lipidos: 250 a 30%

• Acidos grasos saturados: 7%

• Acidos grasos poliinsaturados: 6 a 10%

• Acidos grasos poliinsaturados: por diferencia

En cuanto a los requerimientos de micronutrimentos estos son los recomendados:

En cuanto a la ingesta de agua es importante recordar que una adecuada hidratación es necesaria para facilitar el transporte de nutrientes, eliminar los subproductos y mantener la estabilidad cardiovascular. Las recomendaciones de agua son las siguientes:

• 30 o 35 ml de agua por kg de peso

• Con un mínimo de 1500 ml por dia

• 1 a 1.5 ml por calorías consumidas.

A esto se le debe adicionar las pérdidas que se presentan secundarias a enfermedad o medicamentos

Recomendaciones de alimentación

Su alimentación debe ser variada y completa, con alimentos de los tres grupos básicos: proteínas, carbohidratos y grasas, además de vitaminas, minerales y agua. Prefiera alimentos naturales y frescos.

Fraccionar las comidas en 3 principales y 2 o 3 colaciones, (más número de comidas pero menos cantidad de alimento en cada una de ellas). Después de la última comida esperar por lo menos 1 hora antes de acostarse.

Comer en un ambiente tranquilo, despacio, con pequeños bocados, masticando bien los alimentos. Si existe dificultad en los procesos de masticación y deglución, los alimentos deben ser modificados en cuanto a textura: purés, papillas, cremas, esmechados o molidos. Existen fórmulas nutricionales completas de fácil preparación, ideales en caso de problemas severos de masticación y deglución o de estados prolongados de inapetencia.

Asegurar la ingesta de calcio: leche descremada, quesos blancos en todas sus variedades, yogurt y otros productos lácteos, pescados: sardina, salmón, atún, ostras.

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