Trastornos del sistema olfatorio
Enviado por 1633448 • 24 de Mayo de 2018 • Síntesis • 571 Palabras (3 Páginas) • 214 Visitas
Trastornos del sistema olfatorio
Los traumatismos craneoencefálicos pueden producir déficits
olfatorios por lesión de las vías olfatorias centrales, o de axones receptores
olfatorios al atravesar la lámina cribosa. Los boxeadores,
por ejemplo, pueden ver dañado el sentido del olfato por golpes
en la cabeza que producen movimientos de cizallamiento del bulbo
olfatorio con respecto a la lámina cribosa. La sección transversal de los
delgados axones que forman los filetes olfatorios puede producir una
pérdida parcial o total del olfato, que puede persistir como trastorno
transitorio o permanente. Después de un traumatismo craneoencefálico
también son frecuentes las fracturas de la base anterior de
cráneo. Las laceraciones de la duramadre pueden ser la causa de que
el líquido cefalorraquídeo drene a los senos paranasales y por la nariz
(rinorrea). La afectación de los senos venosos anteriores puede hacer
que se acumule sangre en los tejidos periorbitarios, dando al paciente
No obstante,
los ensayos clínicos ponen de manifiesto que, salvo en un pequeño
número de pacientes, en realidad la disfunción está en el sistema olfatorio.
La razón de esta discrepancia está en que la mayoría confunde
el gusto con el sabor. Al evaluar a un paciente con una posible lesión
olfatoria es importante saber si presenta algún déficit de la capacidad
de percibir o de reconocer un olor. La detección de una sustancia
olorosa indica que el nervio periférico y su vía están conservados. La
identificación del olor pone de manifiesto que la función cortical está
intacta. Si el paciente nota el olor pero no puede recordar su nombre
(agnosia olfatoria), es probable que el trastorno se encuentre en los
niveles superiores del sistema sensorial. Un segundo punto relevante
se refiere al hecho de que las pérdidas olfatorias pueden manifestarse
de forma unilateral o bilateral. Las deficiencias unilaterales se
suelen observar después de enfermedades de la cavidad nasal o de
compresión de un bulbo o tracto olfatorio, asociadas a un tumor. Es
frecuente observar anosmia bilateral en respuesta a un traumatismo
craneoencefálico o a un resfriado común. Pero se ha observado ausencia
de olfato en una de las narinas en casos avanzados de meningioma
del surco del nervio olfatorio.
La disminución de la función olfatoria con la edad es frecuente
incluso en personas sanas. Habitualmente la pérdida es gradual, y muchas
veces el paciente no nota estos cambios graduales, que pueden
afectar a la capacidad de saborear los alimentos en los ancianos.
También se observa disfunción olfatoria en las enfermedades neurodegenerativas
como las de Alzheimer y Parkinson, o en la corea
de Huntington. Estas enfermedades neurodegenerativas afectan a
las vías olfatorias centrales y producen una notable reducción de la
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