Biodiversidad Amenazada

        Biodiversidad Amenazada

Para las especies que están al borde de la extinción, desde las aves a los hongos, el fin puede llegar de 2 maneras. Muchas, como los caracoles arborícolas de Moorea, son eliminadas por el equivalente metafórico de un disparo de rifle: son aniquiladas pero el ecosistema del que desaparecen queda intacto. Otras son destruidas por un Holocausto en el que perece todo el ecosistema. La distinción entre disparos de rifle y holocaustos tienen un mérito especial al considerar el caso del cárabo manchado de los Estados Unidos una especie en peligro que ha sido objeto de una intensa controversia nacional desde 1888. Cada pareja de cárabos requiere alrededor de 3 a 8 km2 de bosque de coníferas de más de 250 años de edad. Solo este hábitat puede proporcionar a la vez a estas aves el número suficiente de árboles huecos para anidar y una extensión de sotobosque abierto para la caza efectiva de ratones y otros pequeños mamíferos. Dentro del área de distribución del cárabo manchado en Oregón occidental y Washington el hábitat a adecuado está confinado en gran parte a 12 bosques nacionales. La controversia se estableció primero dentro del servicio forestal de Estados Unidos y después entre el público en general. Al final fue entre los madereros, que querían seguir talando el bosque primario, y los ambientalistas, determinados a proteger una especie en peligro. La mayor industria local en la zona del área de distribución del cárabo se veía afectada, los intereses financieros eran elevados y la confrontación era emocional. Los madereros decían: <<¿De veras se espera que sacrifiquemos miles de puestos de trabajo por un puñado de aves?>>. Los ambientalistas decían: <<¿hemos de privar a las generaciones futuras de una raza de aves por unos cuántos años más de producción de madera?>>.

En el clamor del debate se pasó por alto el destino de todo un hábitat, el bosque de coníferas añoso, con miles de otras especies de plantas, animales y microorganismos, la gran mayoría de ellos sin estudiar y sin clasificar. Entre ellos hay 3 raras especies y anfibios como el sapo con cola y las salamandras del norte y olímpica. También está presente el tejo occidental, taxus brevifiola, origen del taxol, una de las sustancias anticancerígenas más potentes que se haya encontrado. El debate debería haberse formulado de otra manera: ¿qué otras cosas esperan a ser descubiertas en los bosques añosos del noroeste del Pacífico?

La tala del bosque primario y otros desastres, propiciados por las demandas de las poblaciones humanas en crecimiento, son en todas partes la amenaza avasalladora a la diversidad biológica. Pero incluso los datos que llevaron a esta conclusión, al proceder principalmente de vertebrados y plantas, subestima el problema. Los organismos grandes y aparentes son los más susceptibles a los disparos de rifle, a la matanza y en la introducción de organismos competidores. Son de la mayor importancia inmediata para el hombre y reciben la mayor parte de su atención malévola. La gente caza ciervos y palomas en lugar de cochinillas de humedad y arañas. Abre carreteras en un bosque para recoger abetos de Douglas no musgos ni hongos.

No hay muchos hábitats en el Mundo que cubriendo 1 km contenga menos de 1000 especies de plantas y animales. Retazos de pluviselva y de arrecife de coral contienen decenas de miles de especies, incluso después de haberse reducido hasta un cierto un resto de la selvatiquez inicial. Pero cuando se destruye el hábitat entero, casi todas las especies son destruidas. No solo desaparecen las águilas y los pandas, sino también los más pequeños invertebrados, algas y hongos todavía no censados, los actores invisibles que constituyen los cimientos del ecosistema. Por lo general, ahora los conservacionistas reconocen la diferencia entre los disparos de rifle y holocaustos. Ponen el énfasis en la conservación de habitas enteros y no solo en la de las especies carismáticas que hay en ellos. Son penosamente conscientes de que no puede salvarse el ultimo rebaño de rinocerontes de Java si se desbroza el resto de bosque en el que viven, que las águilas arpías requieren a su alrededor todos y cada uno de los fragmentos de pluviselva que se pueda librar de la sierra mecánica. La relación es recíproca: cuando se protegen las especies estrella como los rinocerontes y las águilas, sirven de paraguas para toda la vida a su alrededor.

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