Acapulco
Enviado por nicolaagd • 26 de Septiembre de 2015 • Trabajo • 6.939 Palabras (28 Páginas) • 181 Visitas
Drogadicción.
Ya es muy tarde y mi familia está sentada en el sofá, viendo la televisión, programas basura que para lo único que sirven es para fundirte el cerebro y llenártelo de mentiras. La programación es la mayor parte del tiempo son telenovelas, que básicamente es la misma fórmula, una y otra y otra vez. Una chica que se enamora de un chico chico rico, se aman pero por algunas ocasiones (en las que algunas veces son absurdas) no pueden estar juntos. El final es siempre el mismo, se casan y viven felices, con la frase de: el amor todo lo puede.
Es por esa razón, por la que yo me limito a ver la televisión, solo mi madre y mis tres hermanas la ven cuando hay telenovelas. Mi padre casi nunca está en casa, muchas veces está trabajando, y yo he tenido que idear algo para entretenerme, así que empecé a leer muchos libros. Como muchas veces, no me dan dinero, tengo que ahorrar hasta dos meses para poder comparar un libro nuevo. Por ello los leo lo más despacio que puedo.
Ahora no he podido juntar nada de dinero, solo ahorro cuando estoy en época de clases, con el dinero que me da mi mama para la escuela, muchas veces me quedo sin comer, a veces me das más, otras veces menos. He querido conseguir un trabajo de medio tiempo, algunas si me aceptaron, el único problema; mis padres.
No quieren que por estar trabajando, descuide la escuela, ese es el típico sermón que ellos me dicen cuando quieran trabajar, más mi padre. No quiere que en cuanto empiece a ver el dinero, me salga de la escuela para exclusivamente trabajar, aunque yo ya le he dicho que solo quiero trabajar un breve tiempo para conseguir algo de dinero para mí, él se hace de oídos sordos.
Ni ahora que estoy de vacaciones me permiten ir a trabajar, aunque ya tengo algo ideado. Pienso decirles que iré a un curso de verano, si llegan a creerme buscare un trabajo.
Mi madre termina de ver su telenovela. Se levanta del sofá junto con mis hermanas. Yo aún me quedo sentado leyendo el último libro que me compre apenas hace un mes. Trata la historia que tiene un chico que vive en abunda pobreza, pasaba días sin comer, vivía en la calle completamente solo, sus padre lo habían abandonado, hasta que un día salvo a un anciano de ser atropellado. Este no tenía familia, su esposa lo abandono de joven, vivía en amplia soledad. No tenía otros familiares. Lo adopto como su hijo. Le dio un techo donde vivir, comida, y no le faltaba ropa. Estudio con ayuda del viejo al que salvo. Al final el chico se convirtió en un millonario, gracias a los negocios.
Entra mi padre a la casa, parece estar muy feliz. Talvez pueda conseguir que me deje trabajar si logro convencerlo, ahora que esta de humor. Esperare hasta que comamos para hacerlo.
Mi madre comienza a servir los platos, cocina unas chuletas con una pequeña ensalada, con un refresco.
-¿Qué tal el trabajo en el hotel papá?- preguntan mi hermana Teresa.
-Muy bien, hoy debido a que comienzan las vacaciones, llegaron turistas.
Mi padre trabaja como jefe de mantenimiento en un hotel cerca de la playa, en algunas ocasiones cuando yo era chico, lo acompañaba, solo para ver como trabajaba, me aburría bastante, por suerte él tenía una pequeña televisión, en donde yo me quedaba viendo caricaturas. Mi madre por otro lado es maestra, es muy buena, también es excelente en la contabilidad, pues ella dice que en secundaria entro a un taller de contabilidad, porque era el más indicado para ella (o la única opción que tenía) ya que los otros eran; herrería, carpintería y mecánica automovilística.
Todo tranquilo, platicas de cómo ha estado el día, mi padre sigue sonriendo, si le voy a preguntar si puedo trabajar en estas vacaciones, es ahora.
-Oye papá, tú crees que talvez ¿pueda trabajar en vacaciones?-digo casi susurrando.
La sonrisa que tenía en el rostro desaparece lentamente, todos regresan a verme, con una expresión de enojo con un poco de disgusto.
-Ya sabes que no me gusta que trabajes.
-Si pero en época de clases, ahora son vacaciones, no tengo nada que descuidar.
-Aun así no me agrada la idea, ya cuando entres en la marina podrás trabajar todo lo que quieras.
Mi padre tiene metida en la cabeza la idea de que yo y mis hermanas, entremos en la marina. El motivo principal por lo que quiere que lo hagamos es simple: el dinero. Si bien es cierto que no empezare directamente a trabajar, sino que será como una universidad, después de terminar, lo que puede decirse que es la universidad en un internado, entrare directamente al trabajo. Se tiene mala fama de estudiar en la marina, debido a lo difícil que es, y estresante. Ya me he cansado de decirle a mi papá que no quiero estudiar ahí
-Papá ya te he dicho que no quiero irme ahí- digo un poco temeroso-. De cualquier forma ¿puedo trabajar en vacaciones?
-La respuesta es no.
-Vamos dame una oportunidad.
Se queda pensando un momento, seguramente me dejara con una condición, es muy seguro que exagere con la condición.
-Bien te dejare trabajar pero….debes de conseguir el trabajo en menos de dos días.
Sabía que iba a exagerar con la condición que iba a imponer, solo que nunca pensé que me diría que tengo dos días para conseguir el trabajo, pensé que solo me pediría que yo compre mis propios cuadernos.
Me le quedo viendo fijamente sin decir nada, su condición me tomo completamente por sorpresa, no sé qué responder.
-¿Dos días?
-Hoy es martes, tienes hasta el jueves para conseguir el trabajo, sino lo haces olvídate.
Acepto su condición al no haber otras opciones, quería trabajar para conseguir dinero para mí y lo conseguí, ahora solo tengo que buscar como loco un trabajo.
Al terminar de comer, limpio mis plastos y voy directamente al periódico para buscar algún trabajo agradable.
Podría ser cajero de alguna tienda, limpiador de una casa, podar el césped de alguien o cuidador de perros. Cualquier cosa estaría bien.
La mayoría de los trabajos buscan personas que tengan experiencia, por un momento empiezo a desanimarme, solo veo que dicen experiencia, titulados, mayores de edad. Es frustrante en cierto punto. Por fortuna, encuentro un pequeño rayo de esperanza dentro de toda la tormenta de frustración.
Hay un pequeño anuncio en la parte inferior derecha del periódico. Piden a un chico que pueda ayudar a limpiar una enorme casa. La suerte parece seguir de mi lado, el lugar donde se trabajara queda a tan solo diez cuadras de mi casa, no piden requisitos, solo tienes que presentarte con mucha suerte de que te den el trabajo.
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