Cuento un viaje grandioso

Un viaje grandioso

En las vacaciones de verano  viajamos a la ciudad de México pero como mi papá no quiso llevar el automóvil por eso tuvimos que viajar en avión así que viajamos a Tuxtla para poder llegar al aeropuerto,  cuando nos subimos al avión mi hermano iba sentado a mi lado nos pusimos a platicar de muchas cosas entre ellas nuestros deseos de grande y él me dijo que quería estudiar para ser ginecólogo o gastroenterólogo pero que jamás iba a estudiar odontología ya que le da fobia tener que revisar los dientes. Al llegar a la ciudad de México mis tíos nos estaban esperando en el aeropuerto como no entramos en su carro tuvimos que meter solamente las maletas y nosotros nos fuimos en microbús hasta el departamento donde viven, al llegar al departamento saludé a mis dos primos el menor de ellos estaba enfermo de neumonía y el mayor tenía hepatitis; después de comer nos pusimos a jugar era un juego muy difícil ya que teníamos que usar el cronometro, después de un tiempo nos aburrimos y comenzamos a platicar, mi primo mayor nos contó que en el colegio tenía un amigo que era homosexual pero nadie lo sabía hasta segundo de preparatoria y también mencionó que nunca le gustaba entrar a las clases de geometría y trigonometría porque le parecían aburridas; al día siguiente recorrimos la ciudad, entramos al zoológico y fue ahí donde me di cuenta que los osos pandas son herbívoros y que el avestruz es ovíparo me divertí mucho estar conociendo los diferentes animales y culturas también me gustaba estar tomando demasiadas fotografías. Cuando salimos de allí nos fuimos a una biblioteca ya que mi primo necesitaba un libro de anatomía después de estar visitando diferentes lugares nos dirigimos al departamento cenamos y vimos un rato las noticias donde mencionaron que un homicida intentaba escaparse de la cárcel pero que afortunadamente los policías lo detuvieron.

Pasaron los días y tuvimos que regresar a casa. Cuando llegó el día de entrar a clases, mis amigos y yo comentamos las experiencias vividas en las vacaciones y lo que me dio risa fue que un amigo tenía homofobia. Pero la verdad es que fue una gran experiencia y en las vacaciones de invierno vinieron mis tíos y primos para conocer Chiapas.          

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