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DEFINIRLA O ANALIZARLA ES SU RAZÓN DE SER O NO SER LITERATURA


Enviado por   •  7 de Marzo de 2017  •  Trabajo  •  1.144 Palabras (5 Páginas)  •  239 Visitas

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DEFINIRLA O ANALIZARLA ES SU RAZÓN DE SER O NO SER LITERATURA

Definir que es literatura, enfrenta a Terry Eagleton con cinco discursos, cinco posturas que giran alrededor del hecho literario. El análisis de las diversas teorías literarias con el objeto de proponer un concepto común es motivo de exposición. Algunos de ellos son por ejemplo, el tratar a la literatura como “OBRA DE IMAGINACIÓN” (en la historia); “UNA ORGANIZACIÓN ESPECIAL DEL LENGUAJE” dada por los formalistas rusos; “UNA FORMA DE ESCRIBIR ALTAMENTE VALORADA” dada por el lector, y otras, son algunos de los discursos propuestos.

Para Jonathan Culler el buscar cómo definirla no basta, sino que amerita un análisis. Descubre que las obras literarias y no literarias poseen una peculiaridad fenoménica en ambas que es la “literariedad”. En su teoría encuentra cinco rasgos: “LA LITERATURA ES FICCIÓN”; “LA LITERATURA TRAE A PRIMER PLANO EL LENGUAJE”, son las que he elegido para comparar y por último “EL PRINCIPIO DE COOPERACIÓN HIPERPROTEGIDO” convención que se da en la literatura.

En su primer discurso Terry Eagleton referencia a “LA LITERATURA COMO OBRA DE IMAGINACIÓN” afirmando que encerrarla en una categoría ficcional, de escribir algo no verídico es incurrir en un error. En el siglo XVI y principios de siglo XVII  la historia da cuenta que tal distinción de la literatura, como  ficcional, no era una distinción de lo real o no real. La novela, que en un sentido contemporáneo, se considera para designar una historia ficticia, por ejemplo podía tener a ambas acepción en ese momento. Para Jonathan Culler “LA LITERATURA ES FICCIÓN” caracterización que el autor acredita como un rasgo más  del hecho lingüístico. El mundo ficcional creado en el que lector se sumerge, cuando se dispone a  leer un texto. Su enunciado guarda relación especial con el mundo, una relación ficcional. La obra se sitúa en  ese mundo irreal entablando relaciones con los personajes y las acciones que les acontecen a ellos, y en donde el lector-receptor implicado, es espectador de lo que se transmite, dicen, viven y en donde es él un componente, preso en ese mundo de palabras. Los diversos elementos del lenguaje, adverbios de lugar, y tiempo, pronombres, no son usados para el momento en que fueron escritos, sino al tiempo, lugar de ese mundo interno de la obra, propios de lo que Culler denomina mundo ficcional narrado.

En un segundo discurso Eagleton expone como literatura “UNA ORGANIZACIÓN ESPECIAL DEL LENGUAJE” idea con la que comulgaban los formalistas rusos. Designando al lenguaje literario como un choque con el lenguaje cotidiano. Se tornaba rarificante, enajenante, con extrañamiento, se deformaba por la presión de los recursos literarios. Actuando de un modo que se intensificaba, retorcía, condensaba, comprimía, extendía, invertía, obteniendo algo extraño al lenguaje, y fuera la  justificación de  la  atención que el lector procurará   en su  acercamiento con el texto. Tornando a la actividad interpretativa, un esfuerzo que es característico y asociado a la  literatura. Para este grupo del principio de siglo XX  se enfocaban en la realidad material, la obra, dejando atrás cualquier tipo de interpretación que se saliera, de ese  texto literario. Consideraban que su funcionamiento debía analizarse como se examina “una máquina”, reduciéndose a  la literatura sólo a poesía. Los recursos como el sonido, imagen, ritmo, sintaxis, metro, rima y otros que usaban los escritores a la hora de escribir. Entonces si solo se analiza con esta perspectiva no satisface al autor ya que los recursos son usados por textos no literarios. El uso de la literariedad es lo que anula para Eagleton la creencia de los formalistas. Esta definición formalista no es suficiente. Ya que si se analiza la utilización de los recursos en un texto, estos también son  utilizados en discursos no literarios.  Entonces el problema persiste, en buscar una definición de lo literario o no literario, si se aplica la teoría formalista. En cambio para Culler quedarse con solo es poesía por el uso de la literariedad en los textos, en la organización especial del lenguaje que se distingue del lenguaje usado con otros fines, no basta. Para él es otro de los rasgos de la Literaturidad de la que  debe reunir esta para ser caracterizada como tal, en su segundo rasgo: “LA LITERATURA TRAE << A PRIMER PLANO>> EL LENGUAJE” el rarificarlo, el exaltarlo a primer plano la estructura lingüística, lanzándolo a la cara para que lo miremos, “soy  lenguaje”, nos sitúa en presencia de algo conformado de manera extraña. Indicándonos  que estamos ante un manejo especial del lenguaje, que atrae nuestra atención hacia lo  antes mencionado.

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