¿Es posible cambiar la forma de ser y de pensar para ganar amigos e influir sobre las personas?

PROYECTOS AGROINDUSTRIALES

ENSAYO

PRESENTADO POR:

MARIA PAULA JIMÉNEZ CASTRO

PRESENTADO A:

MELANIE TERESA JARAMILLO RAMIREZ

UNIVERSIDAD DEL TOLIMA

FACULTAD INGENIERIA AGRONÓMICA

INGENIERIA AGROINDUSTRIAL

IBAGUE

2016

¿Es posible cambiar la forma de ser y de pensar para ganar amigos e influir sobre las personas?

El libro de Dale Carnegie es uno de los bestsellers más leído en la historia, su éxito se debe a las importantes reglas o consejos que el autor da para poder llegar a ser un mejor orador, una persona entusiasta que genera nuevas ideas y que es capaz de adquirir nuevas visiones. Así mismo, puede llegarse a saber cómo evitar discusiones, preservar relaciones personales agradables y, sobre todo, aumentar la influencia sobre personas para lograr que hagan lo que se quiera.  Sin embargo, la pregunta está en si es realmente posible que el lector logre aplicar cada una de las reglas del libro y si es capaz de cambiar en el día a día, tanto en el trabajo como en el hogar y en cada una de las situaciones que se le presenten teniendo en cuenta que el ambiente que lo rodea y la cultura que se tiene en muchos aspectos es contraria a lo que se plantea en el libro.

Por eso, antes de comenzar realmente la lectura, se exponen unas sugerencias para tener un mayor beneficio del mismo y para que realmente se alcance el objetivo propuesto y que la pregunta planteada pueda ser respondida positivamente. Entre las sugerencias más importantes que deben ser aplicadas para llegar a ser una persona que puede influir sobre los demás y así, ganar más amigos están: Tener realmente el deseo de aprender y de aumentar la capacidad para tratar a las personas, para ello, se hace necesario recordar constantemente que muchas de las cosas en la vida se logran mediante la habilidad de tratar a los demás. Otra sugerencia dice “léase cada capítulo rápidamente al principio para lograr una visión a ojo de pájaro. Luego, vuelva atrás y relea detenidamente el capítulo” (Carnegie, 1940), también, debe detenerse con frecuencia a lo largo de la lectura para analizar y procesar la información, preguntarse cómo y cuándo podría realizar lo aconsejado y que beneficios podría traer. También, es importante subrayar cada idea o frase que le parezca importante, releer el libro constantemente, convertir lo aprendido en un juego entretenido y finalmente, hacer un diario para llevar un registro de cómo y cuándo se ha aplicado.

Además de las sugerencias dadas por el autor, es importante resaltar que “no es solamente un libro sobre cómo manipular a los demás para conseguir lo que queremos, sino que con esta maravillosa obra se conseguirá algo mucho mejor: Entender a las personas, comprender su punto de vista, aceptarlo e intentar influir positivamente en la gente que aprecias”  (Savater, 2015)

No obstante, algo importante que hay que tener en cuenta y que influye negativamente o se impone como obstáculo para alcanzar la meta de cambiar y aplicar las reglas del libro tanto en la vida personal como profesional, es que en nuestro país y en nuestra cultura las personas no suelen poner los intereses de los demás por encima de los propios, por lo tanto, se actúa con la filosofía egoísta de solo pensar en sí mismo y como consecuencia, no se poseen las características o valores de amabilidad, comprensión y sinceridad que debe tener la persona que haya puesto en práctica cada uno de los consejos dados por el libro. Así mismo, se hace difícil conseguir un cambio rápido en la manera de actuar, de pensar y en las actitudes que se suelen tomar ante ciertas situaciones.

Como ejemplo de ello, en la primera parte del libro se mencionan las técnicas para tratar el prójimo, entre esas, no criticar es una técnica importante, puesto que, al criticar, siempre se pone a la otra persona a la defensiva, se pueden herir sus sentimientos y generar un resentimiento. Sin embargo, en la actualidad criticar a los demás es una opción que muchas personas han optado por tomar debido a que como se afirma en (Mi superación personal, 2016)  “criticar es de algún modo resaltar que el otro es “inferior” a ti de alguna forma, y lo que realmente estás intentando lograr es sentir que tú eres superior”.  En otras palabras, se disfruta tanto criticar, ya que es una manera de alimentar el propio ego. Como consecuencia, se sigue censurando a los demás y no se trata de cambiar a sí mismo ni de comprender al prójimo.

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