Fecundación, desarrollo embrionario y control prenatal de enfermera

Fecundación, desarrollo embrionario y control prenatal de enfermera

La embriología es una ciencia que se encarga  de estudiar el desarrollo de organismos desde su fecundación hasta su nacimiento, proceso de reproducción y formación de nuevo seres, siendo normalmente su formación de nueve meses. A demás una función que se cumple gracias a una pareja  que aporta gametos sexuales, tanto masculino como femenino, llevando a cabo así la fecundación; es decir, la unión de dos células reproductoras (espermatozoide y  ovulo) formando un cigoto, que se transformara con el tiempo en embrión.

La fecundación lleva a cabo un proceso complicado de formación de una célula, que inicia con la penetración de un espermatozoide en un ovulo, participando en la fecundación únicamente el núcleo y el centrosoma del espermatozoide, dirigiéndose ambos al núcleo femenino y llevando a cabo una fusión, mientras que el centrosoma se divide en dos, de modo que se organiza en esferas atractivas que se colocan en los polos de cigoto para la primera fase de desarrollo del embrión.

En cada uno de los trimestres del desarrollo embrionario, se generan desarrollos en diferentes partes del cuerpo:

Primer trimestre: Siendo la segunda o tercera semana de embarazo, considerada como primera-efectiva, debido a que se produce la ovulación y desprendimiento del ovulo que será fecundado; y ya formado el cigoto, se divide en nuevas células, dividiéndose hasta formar un blastocito, formándose como embrión. La cuarta semana, el embrión mide aproximadamente cinco milímetros y su corazón late a 80 pulsaciones por minuto. La quinta semana empieza a desarrollas los sistemas principales del embrión como cerebro, medula espinal y corazón. La sexta y séptima semana continúan desarrollándose los rasgos que lo identifiquen, como lo ojos, oídos y corazón. La octava semana ya se le denomina como feto, toma su función la placenta que suministra la comida, oxígeno y agua al feto, también se van formando sus manos y sus pies. En la novena y décima semana el feto ya puede entreabrir los ojos, traga y mueve la lengua, ya mide cerca de 7 centímetros y la placenta comienza a nutrir al feto por medio del cordón umbilical.

Segundo trimestre: Lo que más se puede apreciar en este trimestre es la cabeza, y se continúan desarrollando aspectos como uñas, genitales, y su cara ya está formada, sus ojos permaneces cerrados hasta la semana 28. Entre las semanas 15 y 18, se fortalecen sus huesos y mide cerca de  18 centímetros y pesa 200 gramos aproximadamente. Entre las semanas 19 y 21 él feto ya puede oír y se mueve de forma activa y comienza a hacer sus primeros movimientos, flexionando sus músculos provocando así que su madre pueda sentir sus movimientos. En la semana 22, sus primeros pelos, conocidos como ‘laguno’ se extienden a todo su cuerpo. 26 semanas pasa la mayor parte del tiempo dormido y al final de la etapa se desarrollan sus vías respiratorias y su medula ósea empieza a producir células sanguíneas y empieza a almacenar grasa.

Tercer trimestre: Él bebe comienza a terminar de desarrollar diferentes partes de su cuerpo, sus pulmones alcanzan un alto grado de funcionamiento, sin embargo no es el necesario para  sobrevivir fuera del útero, y es capaz de oír ruidos fuertes del exterior. Entre las semanas 27 y 30 él bebe vuelve a abrir los parpados y se aumenta el desarrollo en su sistema nervioso. Su tamaño ocupa la mayor parte del útero, y se suele posicionar de manera invertida, facilitando así la movilidad de sus rodillas y pies. La semana 31 él bebe empieza a retener calcio, hierro y fosforo de su organismo, desarrollando aún más su cuerpo, sus huesos formados, aunque aún continúan blandos y su sistema respiratorio sigue en desarrollo. En la semana 35 ya pesa cerca de 2,5 kilos; tanto su corazón como sus vasos sanguíneos ya se han formado por completo, así como sus huesos y músculos. A partir de la semana 40 se considera que el embrión ya está completamente desarrollado por completo y listo para nacer.

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